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En Jordania dispersan las manifestaciones pro-palestinas en la capital. Aumenta la tensión de seguridad en la nación árabe
Los jordanos han expresado su apoyo a la causa palestina y al establecimiento de su estado.
Durante las últimas horas, la policía de Jordania se ha visto obligada a dispersar con gases lacrimógenos las protestas en rechazo a la contraofensiva israelí que asedia la Franja de Gaza como respuesta a los ataques terroristas del pasado 7 de octubre al sur de la nación hebrea, además de los constantes cohetes que han sido lanzados desde el enclave palestino hacia comunidades civiles en Israel.
Los miles de jordanos que se estaban manifestando en dirección a la frontera nacional con Israel tuvieron que ser acorralados por las fuerzas del orden. Asimismo, algunos de ellos mostraron su apoyo al Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás), además de afirmar que Jordania es “la tierra del regreso, de apoyo al pueblo palestino y todos los muertos a manos de las fuerzas de ocupación”, relató Europa Press.
De hecho, algunos ciudadanos declararon ante la agencia de noticias de Jordania, Petra, que la población palestina “defiende su derecho legítimo a establecerse en esa tierra”, mientras seguían caminando desde Amán, la capital hacia el occidente del país, con destino a la frontera con Israel, a pesar de la lucha de los uniformados por frenar la caravana.
Por otro lado, el pasado jueves, los estudiantes de la Universidad de Yarmuk, realizaron una marcha humanitaria en apoyo a los ciudadanos palestinos, mientras criticaban al unísono la “agresión sionista”, citó la prensa europea.
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Un aliado cercano
Jordania fue el segundo Estado árabe en reconocer la existencia de Israel en 1994, tras Egipto en 1978, lo cual marcó el inicio de una relación diplomática muy importante para el gobierno de Jerusalén, ya que, la nación jordana comparte una frontera significativamente grande con Israel al oriente del territorio hebreo.
Asimismo, Jordania es el país en donde se encuentra la mayor cantidad de refugiados palestinos, con más de 3.1 millones, según el último informe de Joshua Project. Por otro lado, la nación árabe ha sido una de las más interesadas en la solución definitiva al conflicto árabe-israelí iniciado en 1948, además de abogar en reiteradas ocasiones por el establecimiento definitivo de un estado palestino en Cisjordania y Gaza.
A pesar de que algunas naciones árabes estén en desacuerdo con adelantar vínculos diplomáticos o comerciales con Israel, los estados de Marruecos, Sudán, Bahréin y Emiratos Árabes Unidos ya cuentan con relaciones binacionales con la nación hebrea. De hecho, Arabia Saudí estaba negociando un acuerdo de normalización con Israel, teniendo como mediador a Estados Unidos, pero dada la escalada de violencia de la última semana, se paralizaron las reuniones.
Un Estado en medio de la guerra
Jordania comparte fronteras con Israel, Cisjordania, Siria, Irak y Arabia Saudí, estando todos estos territorios, a excepción del último, en constante guerra, tanto dentro como fuera de sus fronteras, por lo que los refugiados sirios, palestinos e iraquíes han encontrado en el Reino Hachemita un lugar de protección en todo Oriente Medio.
Esta nación goza de relativa estabilidad política y social a pesar de las situaciones conflictivas con las que cuentan sus vecinos, por lo que la mayoría de Estados cuentan con buenas relaciones diplomáticas, incluyendo algunas naciones lejanas, como es el caso de Estados Unidos.
En el marco de la guerra entre Israel y Hamás, Jordania ha propuesto, junto a Egipto, habilitar un corredor humanitario en la Franja de Gaza para que los palestinos puedan recibir asistencia médica, al igual que alimentos y agua potable. Sin embargo, tanto Hamás como Israel se han negado a estas pretensiones, por lo que la comunidad internacional ha recomendado a ambos bandos moderar sus ataques, al igual que reconsiderar la opción de un alto el fuego, mientras se atiende localmente a la población civil, la cual ha sufrido el mayor impacto de la confrontación.