Ampliación de vigilancia a solicitudes de visa por parte de EE.UU. afectará a cientos de migrantes: revisarán redes sociales

Donald Trump, desde su vuelta a la Casa Blanca, ha trabajado por fortalecer las políticas migratorias del país, con el objetivo de reducir las cifras de extranjeros indocumentados que residen en Estados Unidos. Para ello, durante las primeras semanas de su gobierno ha implementado una serie de nuevas medidas que limitan el acceso al país y que modifican las opciones para solicitar una visa.

Su última propuesta incluye que todos los solicitantes de ciertos tipos de visado o de la ciudadanía deberán revelar su información de redes sociales en los formularios para aplicar al documento oficial.

Así lo confirmó el Departamento de Seguridad (DHS), que publicó el pasado 5 de marzo un aviso en el Registro Federal en el cual se describe el plan de recopilar datos de las redes sociales de los extranjeros, como sus nombres de usuario, en nueve formularios de inmigración. Esta medida sigue los requerimientos de la orden ejecutiva que firmó el presidente Trump el pasado 20 de enero —el día de su investidura— titulada “Protección de Estados Unidos contra Terroristas Extranjeros y Otras Amenazas a la Seguridad Nacional y Pública”.

De esta manera, el Servicio de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos (Uscis) usará la información para verificar las identidades de las personas y determinar si otorgarles el documento representa algún riesgo para el país.

Los funcionarios de inmigración, en caso de que la regla entre en vigor, examinarán la redes para identificar fraude, que incluye inconsistencias entre los datos de los formularios y los exhibidos en las plataformas sociales. Así mismo, analizarán publicaciones que sugieran vinculaciones con grupos que representan un riesgo. Verificarán relaciones amorosas o familiares, la identidad y el empleo del solicitante, y tendrán en cuenta las publicaciones que reflejen un mal carácter del extranjero.

Esta nueva regla aplica para los siguientes formularios de solicitud de visa:

• N-400 (Solicitud de naturalización)
• I-131 (Solicitud de documento de viaje)
• I-192 (Solicitud de permiso anticipado para entrar como no inmigrante)
• I-485 (Solicitud de ajuste de estatus)
• I-589 (Solicitud de asilo y suspensión de expulsión)
• I-590 (Registro para la clasificación como refugiado)
• I-730 (Petición de familiar refugiado/asilado)
• I-751 (Petición para eliminar las condiciones de residencia)
• I-829 (Petición de un inversionista para eliminar las condiciones del estatus de residente permanente)

Según Uscis, esta política podría afectar a más de 3 millones de solicitantes cada año. Para que entre en vigor, debe pasar por 60 días de revisión, donde los ciudadanos, organizaciones y otras partes interesadas podrán enviar sus comentarios sobre la propuesta en el Portal Federal de Normas Electrónicas. Al finalizar el período de comentarios públicos, el DHS evaluará las reacciones y tomará la decisión de si aplicar definitivamente la norma o retirarla.

Esta propuesta del Gobierno ha desatado reacciones sobre la vigilancia masiva y la recopilación de datos personales a gran escala. Algunos críticos han suscitado que la medida puede ser aplicada incluso después de otorgar el documento, debido a que podría extenderse para vigilar continuamente a los extranjeros.

A esto, el DHS ha negado que los ciudadanos naturalizados serán monitoreados indefinidamente, pero ha anunciado que los datos de sus redes quedarán archivados en bases de datos, en lugar de ser eliminados luego de recibir el documento de visado.