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Estados Unidos provoca críticas de organizaciones de derechos humanos por plan de suministro de bombas de racimo a Ucrania
Este tipo de municiones en racimo están prohibidas para las naciones que ratificaron la Convención sobre Municiones en Racimo, adoptada en Dublín, Irlanda, en mayo de 2008.
Medios de Estados Unidos han informado sobre la posibilidad de que el país entregue bombas de racimo a Ucrania, como parte de un nuevo paquete de armas y municiones para entregar al país, invadido por Rusia desde el 24 de febrero de 2022. La medida ha provocado críticas de parte de organizaciones de derechos humanos.
Bombas de racimo
Una bomba de racimo, también llamada bomba de fragmentación, bomba de dispersión o submunición es una bomba de caída libre, que se lanza de manera dirigida, desde tierra, mar o aire.
Las bombas de racimo pueden causar daños drásticos en los puntos donde son utilizadas, pues contienen un dispositivo que libera un gran número de pequeñas bombas al abrirse, que pueden causar diferente tipo de afectaciones, como perforar vehículos blindados con su carga explosiva, matar o herir a muchas personas de manera indiscriminada con sus fragmentos de metralla, también pueden producir incendios.
Este tipo de municiones en racimo están prohibidas para las naciones que ratificaron la Convención sobre Municiones en Racimo, adoptada en Dublín, Irlanda, en mayo de 2008, una convención que dos años más tarde se convirtió en ley internacional.
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Críticas
“Las fuerzas ucranianas han utilizado munición de racimo que ha causado la muerte y heridas serias a civiles. Las fuerzas rusas han usado de manera extensiva munición de racimo, causando numerosas muertes de civiles y heridas graves”, señala un comunicado reciente de la organización, referido por el medio Bibiochile.
La OTAN
El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, dejó en manos de los aliados de la organización la decisión de suministrar munición de racimo a Ucrania, tras recordar que en el seno de la OTAN no hay una posición común sobre la Convención sobre las Municiones de Racimo de 2008 arriba mencionada.
La convención está firmada por más de 100 países, entre ellos miembros de la OTAN como Alemania, Francia, Reino Unido, Italia o España, pero no Estados Unidos que, según distintos medios de comunicación, estaría sopesando entregar este tipo de munición a Kiev, que tampoco forma parte del acuerdo internacional.
“Una serie de aliados han firmado la convención y otros no. Es una decisión individual decidir sobre la entrega de esta asistencia militar a Ucrania. Es cosa de los gobiernos y no de la alianza”, ha afirmado el jefe político de la OTAN, en rueda de prensa previa a la cumbre de Vilna, Lituania, que reunirá a los líderes aliados la semana que viene.
Guerra brutal
En todo caso, Stoltenberg ha subrayado que se libra una “guerra brutal” y que la munición de racimo ya se usa en el escenario ucraniano por ambas partes. La diferencia, según ha recalcado, es que Rusia emplea este armamento para perpetrar “una guerra de agresión y una invasión y Ucrania para defenderse”.
“La mejor manera de parar este sufrimiento y estas bajas es que Rusia pare la guerra”, ha destacado el ex primer ministro noruego. El Ejército estadounidense comenzó a reducir la producción de esta munición en 2016. Un año después, un informe del Mando Central del Ejército de Estados Unidos describía el terrible efecto de los cientos de pequeños explosivos diseminados por cada cohete portados contra las poblaciones civiles.
Con información de AFP