Estados Unidos
Estados Unidos: un hombre momificado por accidente será enterrado, luego de 128 años
Cuando falleció, no se localizó a ningún familiar y el cadáver se envió a Auman.
Tras más de un siglo de misterio macabro, la ciudad estadounidense de Reading, en Pensilvania, cierra por fin el ataúd de su habitante más extraño: un hombre momificado por accidente que será enterrado finalmente el sábado, después de 128 años.
Multitudes han hecho fila toda la semana para presentar sus respetos, sacar fotos o contemplar con asombro una escena que probablemente nunca se repetirá en Estados Unidos.
“Adiós, Stoneman. Que Dios te bendiga. Descansa en paz”, dice Suzanne Schrum, de 74 años, mientras acariciaba la frente del cadáver y su pelo cobrizo, más de seis décadas después de haber visto por primera vez a la momia.
“Stoneman Willie” era el apodo que recibió hace tiempo un presunto ladrón que murió en 1895 en la cárcel y fue trasladado a la funeraria de Theo C. Auman cuando nadie reclamó su cuerpo, antes de ser momificado accidentalmente por los enterradores.
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“Avanzamos 128 años y sigue aquí”, destacó el director de la funeraria, Kyle Blankenbiller.
El hombre dio un nombre falso cuando fue encarcelado, pero su verdadera identidad se desvelará finalmente durante la ceremonia del sábado, un final apropiado para su vida y su extraña existencia después de la muerte.
“Estamos 99 % seguros de que sabemos quién es”, dijo Blankenbiller durante los preparativos del funeral, en los que los restos de Willie participaron en un desfile reciente para conmemorar el 275 aniversario de Reading.
“Estamos haciendo lo correcto, pero va a ser agridulce”, recalcó.
“Nuestro amigo”
El cadáver ha permanecido tétricamente en un ataúd abierto durante casi toda su estancia en la funeraria. Su piel curtida y sus rasgos faciales suaves y hundidos han sido objeto de fascinación para miles de personas, entre ellas innumerables lugareños curiosos, investigadores y, en décadas pasadas, escolares en viajes de estudios.
Según el compañero de celda de Willie, el hombre detenido por carterismo adoptó el nombre ficticio de James Penn, porque no quería avergonzar a su rico padre irlandés.
Cuando falleció, no se localizó a ningún familiar y el cadáver se envió a Auman.
Blankenbiller explicó que, cuando el embalsamamiento era aún una ciencia incipiente, Auman experimentó con una nueva fórmula.
“La intensidad de la mezcla que utilizó condujo a la momificación de Stoneman Willie, un proceso de eliminación de la humedad que evita la descomposición”, dijo.
Ahora, “ya se le ha mirado bastante”, dijo Blankenbiller. Enterrar a Stoneman Willie durante las conmemoraciones del aniversario de la ciudad es “reverente y respetuoso”, añadió.
“La comunidad dará su último adiós a este tipo que han conocido durante generaciones”, completó.
Entre ellos, Michael Klein, residente en el condado de Berks, fascinado por el “misterio de quién era realmente este tipo”, comentó.
El entierro será digno: una ceremonia, la identidad revelada, una lápida en un cementerio local, todo con Stoneman Willie vestido con un esmoquin negro de la década de 1890.
“Todo el mundo viene a Estados Unidos a vivir el sueño americano. Nadie viene a morir en una prisión desconocida”, dijo Klein. “Esa es la verdadera oscuridad de este mito y pronto se resolverá”.
*Con información de AFP.