España
Ir a prisión para no estar solo, la petición de un hombre enfermo con un cáncer terminal
La cárcel, no obstante, ha advertido que no puede recibirlo porque no es un delincuente.
Un español de 60 años y víctima de una enfermedad terminal es el protagonista de una impactante historia surgida en ese país, luego de que se conociera que el ciudadano, proveniente de la región de Granada, decidiera reunirse con el director de una prisión con el fin de solicitarle que lo interne al interior de esta, advirtiendo que si bien él no es prófugo de las autoridades, ni es responsable de delito alguno, desea ser llevado preso por una sencilla y difícil razón: no desea estar solo.
En su solicitud, el ciudadano explicó que interno en la cárcel contaría con compañía y cuidados; situación que en medio de su actual convalecencia no tiene, y aunque el director del penal le explicó que no puede recibirlo, en tanto él no es una persona que necesite ser ‘castigada’, el hombre desahuciado por los médicos advirtió que si bien no quiere estar solo, su desespero actual tampoco le permiten hacer daño con el objetivo de ser ‘castigado’.
El protagonista de esta impactante historia, según recogen medios locales, es un hombre identificado como Justo Márquez, quien fue diagnosticado con cáncer, y quien explica que la prisión de la Alhaurín de la Torre, en Málaga, España, es su alternativa de poder por lo menos morir acompañado y con los necesarios cuidados, en tanto en su casa carece de ellos.
El hombre reconoce que debido a su enfermedad “tiene miedo de estar solo”, explicando que dentro de la cárcel sus mismos compañeros podrían socorrerlo en caso de que algo le sucediera.
Sobre la enfermedad que padece el hombre, esta fue diagnosticada en el año 2020, presentando, según recogen medios locales de España, un significativo avance, debilitando y complicando la salud del hombre.
Según explicó a medios locales, el hombre, actualmente vive solo, y está sumido en una crisis de depresión dado su estado de soledad y de salud, por lo que la cárcel sería un lugar en el que al menos tendría con quien hablar.
“Si algún día me llega a pasar algo, quién sabe cuando me encuentren”, explicó el hombre, quien también argumentó que por su edad y estado de salud, es muy sensible a que algún accidente le pueda suceder, argumentando que además ha sido diagnosticado con algunos males relacionados con su salud mental dado su contexto personal.
El hombre advierte que cuando ha acudido al especialista en salud mental comentando su situación, este le ha sugerido acudir a su médico de cabecera para que le pueda recetar otra medicina que le ayude a paliar su enfermedad.
El paciente explica que no siente que los especialistas en salud física y mental le presten la atención que requiere, por lo que se le abrió la idea de buscar ser internado en una cárcel para estar vigilado.
En su solicitud a la cárcel de Alhaurín, el hombre fue directo solicitando su ingreso, explicando que está dispuesto a adelantar una protesta para que su solicitud sea escuchada, pese a que ya ha recibido negativas por las autoridades.
Recientemente, el barrio Peckham, al sur de Londres, fue escenario de una particular noticia derivada de la muerte de una mujer solitaria, quien habría fallecido en 2019, no obstante, debido a que nadie se percató de su muerte, su cuerpo solamente fue hallado en 2022, gracias a que una vecina, de un apartamento abajo del suyo, decidió cambiar una bombilla, y al hacerlo se encontró con un cúmulo de gusanos que provenían de un piso más elevado, desencadenando una investigación que permitió dar con la mujer muerta.
La mujer fallecida fue identificada como Sheila Seleoane, quien trabajaba de modo virtual, por lo que su ausencia no fue notada por compañeros que notaran su no asistencia física al trabajo, o un vecino que la echara de menos, pues ella casi no salía.