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Javier Milei recordó su emotivo encuentro con el papa Francisco cuando le pidió perdón: “Son errores de juventud”
Milei compartió anécdotas del diálogo que tuvo con el papa y reflexionó sobre el cambio en su mirada hacia Jorge Mario Bergoglio.
En la antesala del funeral del papa Francisco en Roma, el presidente argentino Javier Milei evocó el encuentro que mantuvo con el santo padre en febrero de 2024, un momento que definió como profundamente significativo en su vida personal y política.
Durante una entrevista en Radio Mitre, Milei compartió anécdotas del diálogo que tuvo con el papa y reflexionó sobre el cambio en su mirada hacia Jorge Bergoglio.
El presidente rememoró cómo, al asumir la Presidencia, tomó verdadera dimensión de la responsabilidad que implica liderar un país y cómo eso le permitió comprender, aún más, el enorme peso espiritual que cargaba Francisco, guía de cerca de dos mil millones de fieles en todo el mundo.
Durante la audiencia en el Vaticano, el mandatario le pidió perdón personalmente por las críticas pasadas. La respuesta de Francisco, recordó Milei con una sonrisa, fue inmediata y comprensiva:
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“No te calentés, son errores de juventud”, y añadió entre risas que el pontífice también le dijo: “De jóvenes todos hacemos boludeces”.
Conmovido, Milei destacó al papa Francisco como “el argentino más importante de la historia” y lamentó su fallecimiento, subrayando la huella imborrable que deja no solo en la Argentina, sino en todo el mundo.
“Fue un líder espiritual inmenso, un símbolo de humildad, de paz y de compromiso con los más humildes”, expresó.
Milei emprendió viaje a Roma para participar de la misa exequial y los actos oficiales de despedida del papa Francisco, el primer pontífice latinoamericano, quien falleció el pasado lunes a los 88 años.
Milei, junto a miles de fieles y decenas de líderes internacionales, se hizo presente en el Vaticano para rendir homenaje a una de las figuras más influyentes y queridas de la Iglesia católica y del escenario global contemporáneo.
La ceremonia de despedida tuvo lugar en la imponente plaza de San Pedro, donde desde primeras horas de la mañana se congregaron más de 250.000 personas, según informó el Vaticano.
Entre aplausos, oraciones y gestos de respeto, el mundo católico despidió al papa que predicó la humildad, la misericordia y la fraternidad como ejes de su misión pastoral.
