Kristin Cabot, la ejecutiva de Recursos Humanos que fue descubierta besándose con su jefe casado en la cámara del concierto de Coldplay, finalmente habló sobre el escándalo que le cambió la vida y acabó con su carrera.
La mujer atribuyó el incidente a una “mala decisión” después de “un par de High Noons”, refiriéndose a la popular bebida hard seltzer hecha con vodka real y jugo de fruta.
La mujer de 53 años, madre de dos hijos, rompió su silencio en entrevistas publicadas este jueves, 18 diciembre, meses después de que su demostración pública de afecto de 16 segundos con su entonces jefe, el director ejecutivo de Astronomer, Andy Byron, la dejara como un “meme” y “inempleable”.
“Tomé una mala decisión y tuve un par de High Noons y bailé y actué de manera inapropiada con mi jefe”, le dijo a The New York Times, aunque admitió que él era su “gran amor platónico”.
“Y no es nada. Asumí la responsabilidad y renuncié a mi carrera por ello. Ese es el precio que elegí pagar”, comentó la mujer en la entrevista con el medio estadounidense.
En otra entrevista con el The Times de Londres, Cabot continuó hablando del momento incómodo que pasó ese día: “Podría haberme caído un rayo, podría haber ganado la lotería o podría haber sucedido esto”, dijo.
“Pero no soy ninguna celebridad, solo soy una madre de New Hampshire”, añadió. “Aunque tuviera una aventura, no es asunto de nadie”.
“Ha sido como una letra escarlata; la gente ha borrado todo lo que he logrado en mi vida y en mi carrera. Esta no puede ser la última palabra”, dijo en la entrevista.
“Fui la gerente de recursos humanos más difamada de la historia de RR. HH.”, afirmó al UK Times.
El pasado 20 de julio, Byron renunció luego del video en el que se le ve abrazando a una presunta compañera de trabajo en un concierto de Coldplay y se viralizó en redes sociales como un acto de infidelidad infraganti.
“Andy Byron presentó su renuncia y fue aceptada”, señaló Astronomer, al anunciar la salida de su jefe en un comunicado compartido en LinkedIn.
“Se espera que nuestros líderes fijen estándares de conducta y responsabilidad, y recientemente, esos estándares no se han cumplido”, indicó la empresa de desarrollo de software con sede en Nueva York, que previamente había iniciado una investigación.
