Periodista fue añadido accidentalmente al chat secreto del equipo de Donald Trump y leyó mensajes con sus planes de guerra

Un hecho sin precedentes ha tenido lugar en las últimas horas, en Estados Unidos, después de que se diera a conocer que el editor de una prestigiosa revista norteamericana fue incluido en una cadena de mensajes de texto, en un grupo manejado por la administración Trump.

Se trata de Jeffrey Goldberg, editor en jefe de la revista The Atlantic, quien decidió contar su historia a través de un artículo publicado en su medio, en el que narró lo que sucedió cuando accidentalmente fue incluido en el grupo del equipo de seguridad nacional de Estados Unidos.

En el grupo estaban varios altos funcionarios del equipo de Trump, incluidos el vicepresidente de Estados Unidos, J.D. Vance; el secretario de Defensa, Pete Hegseth, y el asesor de Seguridad Nacional, Mike Waltz.

En el chat hablaron de importantes temas, pero, sobre todo, discutieron ataques contra el grupo terrorista Hutí, en Yemen, en una sorprendente violación de la seguridad nacional.

Goldberg contó cómo fue incluido en la cadena de mensajes de la red social Signal, en el grupo llamado “el pequeño grupo Houthi PC”, donde recibió un alto flujo de deliberaciones internas y detalles operativos sobre el ataque que se está llevando a cabo contra el grupo respaldado por Irán.

Las bombas cayeron sobre el país de Medio Oriente el 15 de marzo y la administración Trump afirmó haber “eliminado” a varios líderes.

El portavoz del Consejo de Seguridad Nacional, Brian Hughes, le dijo al NY Post que la cadena Signal, que incluía a Goldberg, “parece ser una cadena de mensajes auténtica y estamos revisando cómo se agregó un número inadvertido a la cadena”.

“Es la primera vez que me hablas de esto”, dijo el presidente a los periodistas. “¿Qué tiene que ver con qué? ¿De qué hablaban?”, agregó.

La secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, dijo más tarde: “El presidente Trump sigue teniendo la máxima confianza en su equipo de Seguridad Nacional, incluido el asesor de seguridad nacional, Mike Waltz”.

El incidente provocó protestas bipartidistas en el Capitolio, y el vicepresidente del Comité de Inteligencia del Senado, Mark Warner (demócrata por Virginia), escribió en X: “Esta administración está jugando con la información más clasificada de nuestra nación, y eso hace que todos los estadounidenses estén menos seguros”.

“La información clasificada no debe transmitirse por canales no seguros, y mucho menos a quienes no tengan autorizaciones de seguridad, incluyendo a los periodistas. Punto”, añadió el representante Mike Lawler (republicano por Nueva York). “Deben implementarse medidas de seguridad para garantizar que esto no vuelva a ocurrir”, enfatizó.

Entre los altos funcionarios de la administración que participaron en el chat de Signal se encontraba alguien identificado solo como MAR, las mismas iniciales del secretario de Estado, Marco Rubio; el director de la CIA, John Ratcliffe; el enviado especial para Oriente Medio, Steve Witkoff, y la jefa de Gabinete de la Casa Blanca, Susie Wiles, entre otros.

Otro usuario llamado Joe Kent, el mismo apodo del elegido por Trump para dirigir el Centro Nacional Antiterrorista, argumentó que “no hay nada urgente que impulse el cronograma” y enfatizó: “Tendremos exactamente las mismas opciones en un mes”.

Hegseth respondió a Vance: “Comprendo sus inquietudes” y sostuvo que “el mensaje será complicado de transmitir en cualquier caso —nadie sabe realmente quiénes son los hutíes—, por lo que debemos enfocarnos en dos puntos clave: 1) El fracaso de Biden y 2) El financiamiento de Irán”, dijo.

Por su parte, el director del Pentágono defendió la necesidad de llevar a cabo un ataque, subrayando la importancia de no dar señales de indecisión.

Waltz intervino diciendo: “Ya sea ahora o en las próximas semanas, Estados Unidos tendrá que restablecer estas rutas marítimas. Siguiendo la solicitud del presidente, estamos colaborando con el Departamento de Defensa y el Departamento de Estado para evaluar los costos involucrados y trasladárselos a los europeos”.