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¿Quién era la familia de ‘sangre’ del papa Francisco y su ‘última’ familia en El Vaticano?
El sumo pontífice tenía una sobrina que piensa que la religión está “obsoleta” e incluso a un familiar profesional del fútbol.
El mundo despidió al papa Francisco en Roma, después de una solemne misa en la plaza de San Pedro, donde asistieron cientos de invitados especiales de todo el mundo, incluyendo a presidentes, primeros ministros y otros personajes de la política a nivel mundial.
Sin embargo, sólo sus familiares asistieron a su funeral. Bergoglio fue el mayor de cinco hijos de Regina María Sívori y Mario José Francisco, quienes fueron inmigrantes italianos que criaron a su familia en Buenos Aires, Argentina.
Una de sus hermanas, la única viva, vio por última vez al sumo pontífice en 2013, un poco antes de que asistiera al cónclave programado en Roma y finalmente se convirtiera en el líder máximo de la Iglesia católica, según la revista Hola.
María Elena no fue a Roma para la toma de posesión de Francisco, pues “mi hermano nos pidió que ahorráramos dinero y lo usáramos para obras de caridad”, dijo en ese momento; hoy en día, vive entre monjas que la cuidan.
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El hijo de María Helena y sobrino de Francisco, José Bergoglio, dijo que su familia no viajaría a Roma para los funerales de su tío, según una publicación en X del miércoles del secretario de Culto y Civilización de Argentina, Nahuel Sotelo.
“José me contó que la decisión de él y su madre fue seguir el ejemplo del santo padre y que nunca habían considerado viajar, pues creen que es la mejor manera de honrar la memoria de Francisco”, escribió Sotelo.
La hija de María Elena, hermana mayor del papa Francisco, Cristina Bergoglio, es una famosa actriz que está radicada en Madrid, España. Fue ella quien confesó en una entrevista en 2014 que no es religiosa y calificó a la Iglesia de “obsoleta”.
Según el diario La Nación, Mauro Bergoglio, otro de los sobrinos de Francisco, estaba esperado para participar del entierro del sumo pontífice, quien fue enterrado en la basílica de Santa María la Mayor, gracias a un donante privado que habría pagado por el viaje del familiar y de su esposa.
Mauro, hijo del difunto hermano del papa, Óscar, dijo que la dueña de la agencia de viajes Rita Mattiello le ofreció boletos cuando lo escuchó decir en una transmisión de noticias argentina que no podía pagar el viaje.
“Me rompió el corazón enterarme de que no podía viajar”, declaró Mattiello a La Nación. “Lo vi impotente. Él y su esposa deberían haber sido de los primeros en ser invitados oficialmente a viajar”.
Felipe Bergoglio, sobrino nieto de Francisco, de 21 años, juega actualmente en el club de fútbol italiano Castiglionese 1919, según La Derecha Diario.
Felipe nunca llegó a conocer personalmente al papa, reveló en una entrevista en agosto con La Nazione, pero Francisco “siempre preguntaba por nuestra familia” mientras hablaba con el padre de Felipe, uno de los primos de Francisco.
El féretro de Francisco fue acompañado en su velatorio íntimo por quienes, en sus últimos años, se convirtieron en su familia más cercana dentro del Vaticano.
Entre ellos se encontraban sus tres secretarios personales: Juan Cruz Villalón, sacerdote argentino de plena confianza del papa Francisco; Manuel Pellizzon, un joven clérigo italiano que lo asistió en diversas gestiones diarias, y Fabio Salerno, quien, además de secretario, era uno de sus colaboradores más discretos en temas de protocolo.
Junto a ellos estuvieron también varios miembros del personal de apoyo y Massimiliano Strapetti, su enfermero personal, quien se había ganado un lugar especial por su dedicación constante a la salud del pontífice.
Todos ellos, visiblemente emocionados, rindieron su último homenaje besando el ataúd antes de que este fuera trasladado a la plaza para el funeral público.
