Mundo
¿Traición? El aliado de Estados Unidos y potencia mundial que quiere normalizar sus relaciones con Corea del Norte
La Asamblea General de la ONU ha mostrado la postura de varios países.
Corea del Norte se ha vuelto una piedra en el zapato para Occidente y para varios aliados de Estados Unidos que están en territorio asiático.
Precisamente, ante la amenaza que presenta este país en esa región, varios han querido normalizar las relaciones con el régimen de Kim Jong-un. Uno de ellos es Japón.
El primer ministro japonés, Fumio Kishida, aprovechó su discurso en la Asamblea General de la ONU para expresar su voluntad de reunirse “sin condiciones” con el líder de Corea del Norte y abordar la tensa situación en la península de Corea y lograr “normalizar las relaciones” diplomáticas con Pyongyang.
“Desde la perspectiva de abrir una nueva era juntos, me gustaría trasladar mi determinación de reunirme con el presidente Kim Jong-un, cara a cara y sin condiciones, y me gustaría mantener conversaciones de alto nivel bajo mi supervisión directa para materializar una cumbre cuanto antes”, aseveró Kishida.
Tendencias
Kishida defendió durante su discurso que “la política de Japón sobre Corea del Norte sigue sin cambios” y ha insistido en que “Japón busca normalizar sus relaciones con ese país, en línea con la Declaración de Pyongyang, a través de la resolución de forma exhaustiva de los asuntos pendientes, como los secuestros, los asuntos nucleares y balísticos y el arreglo de nuestro desafortunado pasado”.
Insistió en el desarme nuclear que ha hecho en Japón y lo calificó como “su misión de vida” y manifestó que “para lograr un mundo sin armas nucleares hay que seguir impulsando esfuerzos realistas y prácticos mientras que respeta y refuerza el Tratado de No Proliferación”.
“Pido a los líderes políticos de los estados con armas nucleares y de otros países del mundo que incrementen su compromiso con el desarme nuclear”, señaló Kishida, quien advirtió que el mundo “hace frente a la amenaza de una marcha atrás en la tendencia de disminución de las armas nucleares”.
En este sentido, ha argüido que es necesario “trascender los esfuerzos puramente gubernamentales y participar en esfuerzos de muchas capas” y ha hecho hincapié en la necesidad de “garantizar la seguridad nuclear y la seguridad de los materiales e instalaciones nucleares, también en situaciones de conflicto”.
“El mundo hace frente a unos problemas complejos e interrelacionados que van desde el cambio climático, las enfermedades infecciosa y los desafíos al Estado de Derecho. En un momento en el que la cooperación internacional es más necesaria que nunca, no podemos superar estas dificultades si la comunidad internacional sigue dividida por ideologías o valores”, sostuvo el mandatario.
Recalcó la necesidad de “volver al pilar básico de tratar la vida y la dignidad humanas con la mayor importancia” y abogó por “un idioma común que resuene para todos”.
Para hacer frente a unas crisis y desafíos sin precedentes y proteger y fortalecer la dignidad humana, hay que empezar paso a paso desde donde podamos”, explicó el presidente japonés.
Por último, el primer ministro criticó que “la agresión de Rusia contra Ucrania continúa” y afirmó que “la crisis alimentaria no debe perpetuarse”.
“Es esencial apoyar a las personas vulnerables en África, Oriente Próximo y el resto de lugares”, dijo, y al mismo tiempo lamentó que “Rusia, un miembro permanente del Consejo de Seguridad (de la ONU), viole el Derecho Internacional”.