Mundo
Tras ser descubierto teniendo sexo en la calle, turista italiano es deportado desde Indonesia
El hecho ocurrió en la paradisiaca isla de Balí, donde el joven conoció a una habitante local y, ahora, por sus hechos obscenos, hace parte de la lista de personas ‘vetadas’ para entrar al país.
Deportado de vuelta a su país de origen, así terminó un turista italiano que recientemente fue expulsado de Indonesia, tras haber sido descubierto manteniendo una relación sexual en vía pública de la isla de Bali tras una noche de rumba en la que conoció a una habitante local.
Según destacan medios internacionales, la noche de rumba y placer le costó al turista italiano no solo su estancia en el país, en tanto terminó deportado, sino que también le significó el haber sido inscrito en el libro negro de la isla, situación que le impedirá volver a ‘turistear’ allí por un buen tiempo.
El hecho ocurrió luego de que llegara al poder de las autoridades un video grabado por habitantes locales, en el que se puede ver al hombre disfrutar de un encuentro sexual con una lugareña, en horas de la madrugada, en el antejardín de una casa, cuyos habitantes, al advertir la situación, decidieron grabarlo para difundirlo a través de las redes sociales a manera de denuncia y escarmiento en contra del turista.
De acuerdo con medios locales, el hecho impúdico que alertó a la comunidad se presentó en la localidad de Seminyak, donde los agentes policiales rápidamente lograron identificar al turista para aprehenderlo y enviarlo de regreso a su país de origen.
Si bien las autoridades no revelaron la identidad del hombre expulsado de Bali, sí dieron a conocer que este es de nacionalidad italiana, por lo que fue enviado a Roma y sus iniciales son LS.
La deportación del hombre se habría cumplido, de acuerdo con medios internacionales, el pasado fin de semana, recortando así el tiempo que el turista tenía previsto ‘disfrutar’ de la isla, siendo su fecha inicial de regreso estipulada para el próximo 3 de octubre.
De igual modo, se ha revelado que el hombre deportado tiene 35 años de edad y había arribado a la isla paradisiaca el pasado 4 de septiembre.
Sobre el particular, autoridades de Indonesia precisaron que el turista fue sacado de la isla en un avión de la aerolínea Malaysia Airlines, que se dirigía a Kuala Lumpur, Malasia, lugar donde posteriormente sería pasado a un vuelo de la aerolínea Qatar Airways que se dirige a Roma, haciendo una parada previa en Doha, Qatar.
El tiempo del veto
Aunque bien las autoridades han advertido que el hombre deberá permanecer ’vetado’ por un largo tiempo de la posibilidad de volver a pisar territorio de Balí, las autoridades de Indonesia, en declaraciones entregadas a medios internacionales, han advertido que la prohibición podría durar cerca de un año, luego del cual el turista sí podría volver allí.
Sobre los hechos que rodearon a la noche de placer que ahora le costó la deportación al turista, medios internacionales han explicado que aquel día, el pasado 9 de septiembre, el hombre había salido de fiesta a un club nocturno, donde conoció a una habitante local con quien habría decidido pasar la noche en el hotel; no obstante, los tragos y la calentura del momento llevaron a la pareja a recurrir a intimar en la calle; un hecho ampliamente condenable por las autoridades y los habitantes de ese país.
Medios internacionales también recogieron la denuncia del indignado ciudadano que descubrió a la pareja copulando, quien describió que realmente alertó sobre lo sucedido fue su perro que comenzó a ladrar a esa hora de la madrugada, obligando a que el dueño se asomara para encontrarse con el referido encuentro íntimo.
El hombre advirtió que pensó que se trataba de una persona orinando, pero al revisar las cámaras de seguridad, se encontró con la sorpresa de que se trataba de una pareja copulando.
Si bien la pareja intentó escapar del lugar, las autoridades lograron la identificación del hombre gracias a las imágenes de la cámara de seguridad, logrando entonces su arresto.
Por su parte, la mujer no fue arrestada.
En lo corrido del año, Bali, uno de los destinos más paradisíacos del mundo, y masivamente visitado, ha sido escenario de la deportación de al menos 200 personas en los primeros ocho meses del año, una cifra que ha aumentado respecto a la estadística del año anterior.