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Trump revela el futuro de Elon Musk como asesor en la Casa Blanca. “En algún momento volverá”
El magnate ha sido una de las figuras más cercanas al presidente republicano, pero podría salir pronto del gobierno de la Casa Blanca.
El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, aseguró este lunes que quiere mantener a Elon Musk en la Casa Blanca, esto mientras el magnate esté dispuesto a seguir administrando el Departamento de Eficiencia Gubernamental (Doge, por sus siglas en inglés), pero sugirió que el tiempo del multimillonario empresario tecnológico en el gobierno republicando podría estar llegando a su fin dentro de poco.
“Creo que ha sido increíble, pero también creo que tiene una gran empresa que dirigir”, declaró Trump a la prensa el lunes en el Despacho Oval antes de firmar una orden ejecutiva contra la reventa de entradas en eventos en vivo.
“Y en algún momento, volverá. Él quiere hacerlo”, aseguró el mandatario, dejando entrever que Elon Musk podría salir pronto de la administración en Washington.
Musk, director ejecutivo de Tesla y SpaceX y asesor principal de la Casa Blanca, trabaja en la administración Trump como “empleado gubernamental especial”, una designación para los empleados del gobierno federal que trabajan 130 días o menos durante un año calendario. Esto significaría que el mandato de Musk terminaría a finales de mayo si la Casa Blanca cumple con las directrices federales y su estatus gubernamental no cambia.
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“Lo mantendría en su puesto mientras pudiera. Es un tipo muy talentoso. Me encanta la gente inteligente. Y él es muy inteligente y ha hecho un buen trabajo”, aseguró el presidente de los Estados Unidos en elogio al CEO de Tesla, Starlink y X, recordando que en los últimos meses se ha convertido casi en una mano derecha para el mandatario republicano en la Casa Blanca, donde tomó mucha relevancia.
Como director de Doge, Elon Musk ha dirigido los esfuerzos de la administración Trump para eliminar programas de gasto aprobados por el Congreso y despedir a decenas de miles de trabajadores federales en un intento por reducir drásticamente el gobierno y todo lo concerniente al gasto gubernamental, esto a pesar de las polémicas que ha generado su papel en la Casa Blanca.
Por ejemplo, los demócratas y otros críticos de Musk argumentan que su papel principal en la Casa Blanca le ha dado al hombre más rico del mundo un acceso peligroso a decisiones políticas que generan una variedad de conflictos, dados los miles de millones de SpaceX en contratos con el gobierno federal, asegurando que su participación en el gobierno podría beneficiar a sus empresas, pero es algo que siempre se ha negado desde Washington.
El alcance de la influencia de Musk va mucho más allá del Doge. Musk se ha convertido en la cara visible de la administración Trump, utilizando su enorme número de seguidores en X para exponer las políticas de la Casa Blanca, asistiendo a reuniones del Gabinete, facilitando el regreso de dos astronautas del espacio y, el fin de semana pasado, visitando Wisconsin para hacer campaña por el candidato respaldado por Trump en las elecciones estatales a la Corte Suprema.
Según una orden ejecutiva firmada por Trump el primer día, el Doge finalizará sus operaciones después de 18 meses el 4 de julio de 2026, coincidiendo con el 250 aniversario de la firma de la Declaración de Independencia. Trump dijo que sus secretarios de gabinete comenzarán a desempeñar las funciones de reducción de costos de del departamento después de que Musk se vaya y la oficina cierre.
