Mundo
Consumidores inician boicot contra Target por cambios en políticas DEI
La respuesta de la empresa a estas presiones y su capacidad para navegar este complejo panorama determinarán su posición en el mercado.

Target, una de las principales cadenas minoristas de Estados Unidos, enfrenta un boicot de 40 días por parte de consumidores en respuesta a sus recientes cambios en las políticas de Diversidad, Equidad e Inclusión (DEI). Esta protesta, que coincide con el inicio de la Cuaresma, ha sido impulsada por líderes comunitarios que consideran que la empresa ha dado la espalda a compromisos previamente establecidos con diversas comunidades.
El reverendo Jamal Bryant, pastor de la megaiglesia New Birth Missionary Baptist Church en Atlanta, es una de las figuras centrales detrás de este boicot. Bryant ha instado a su congregación y a la comunidad en general a abstenerse de comprar en Target durante este período, argumentando que la decisión de la empresa de reducir sus iniciativas DEI representa una traición a la comunidad negra y a otros grupos minoritarios que han sido fieles clientes de la tienda.

La controversia surgió después de que Target anunciara en enero que reduciría varios de sus programas DEI. Esta medida se enmarca en una tendencia más amplia entre las corporaciones estadounidenses, que han reevaluado sus políticas de diversidad tras la administración del presidente Donald Trump, la cual revirtió programas federales de DEI. La decisión de Target ha sido percibida por algunos como una priorización del consumismo sobre la decencia y el respeto hacia comunidades históricamente marginadas.
El impacto del boicot ya es notable. De acuerdo con reportes de la cadena CNN más de 110.000 personas se han comprometido a participar en la protesta, recibiendo además directorios de negocios propiedad de personas negras para apoyar alternativas durante estos 40 días. Esta movilización refleja un descontento creciente entre consumidores que buscan responsabilizar a las corporaciones por sus decisiones en materia de inclusión y equidad.
Lo más leído
Sin embargo, no todos están de acuerdo con el boicot. Algunos propietarios de negocios negros, cuyos productos se venden en Target, han expresado preocupación de que la protesta pueda afectar negativamente sus ventas y visibilidad. Argumentan que la presencia de sus productos en una cadena nacional como Target es crucial para el crecimiento y sostenibilidad de sus negocios, y que un boicot podría tener consecuencias no deseadas para ellos.
Además del boicot, Target enfrenta otros desafíos significativos. La empresa ha advertido sobre posibles aumentos de precios en productos debido a los aranceles del 25 % impuestos por la Administración Trump a las importaciones de México y Canadá. Estos aranceles afectan a productos básicos como frutas y verduras, lo que podría disuadir aún más a los consumidores y afectar las ventas de la compañía en un momento ya delicado.

La situación de Target no es aislada. Otras grandes corporaciones, como Amazon y Tractor Supply, también han anunciado públicamente la eliminación de algunas iniciativas DEI, mientras continúan apoyando otras de manera discreta. Esta dualidad refleja la complejidad que enfrentan las empresas al intentar equilibrar sus valores corporativos con las presiones políticas y legales actuales.
El concepto de “Go woke, go broke” ha ganado relevancia en este contexto. Esta expresión, utilizada por sectores conservadores, sugiere que las empresas que adoptan políticas progresistas corren el riesgo de sufrir pérdidas financieras. Aunque algunos casos parecen respaldar esta afirmación, la realidad es más compleja, ya que factores económicos, sociales y políticos influyen en el desempeño de una empresa.
Target se encuentra en una encrucijada, enfrentando un boicot significativo y desafíos económicos derivados de políticas comerciales nacionales. La respuesta de la empresa a estas presiones y su capacidad para navegar este complejo panorama determinarán su posición futura en el mercado y su relación con las comunidades a las que sirve.