Una carta del gobierno de Estados Unidos informando sobre la aprobación de su trámite inmigratorio llegó cuando ya era demasiado tarde.
Miguel Ángel García, un inmigrante bajo custodia de ICE, había muerto semanas antes tras un tiroteo ocurrido cerca de una de sus instalaciones en Texas, un hecho que hoy deja en evidencia las demoras y contradicciones del sistema migratorio.

Carta migratoria de USCIS llega tras muerte de inmigrante en tiroteo a sede de ICE
Una carta del Servicio de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos (USCIS) aprobando la solicitud de un perdón migratorio por parte de Miguel Ángel García, llegó a la casa de su familia, semanas después de que él fuera asesinado en un tiroteo contra una oficina de Servicio de Inmigración y Control de Aduanas, ICE, en Dallas.
La misiva, con fecha del 9 de diciembre de 2025, informaba que el trámite para avanzar hacia una visa o una residencia permanente había sido autorizado.
Pero García ya había fallecido hace dos meses, tras resultar herido en el ataque del 24 de septiembre, cuando un tirador desde un edificio cercano abrió fuego contra la instalación federal, según informó Univisión.
Viuda de inmigrante recibe aprobación que nunca podrá usar antes de Navidad
Su esposa, Stephany Gauffeny, ciudadana estadounidense, relató que abrió el sobre sin saber su contenido y se quebró al ver lo que decía “You’ve been approved” (“Has sido aprobado”).
La carta representa el perdón por presencia ilegal que la pareja esperaba desde hace años para avanzar en su proceso migratorio.
García, de origen mexicano y con residencia en Estados Unidos, había sido arrestado en agosto por conducir bajo la influencia del alcohol y pasó al cuidado de ICE en Dallas, cuando un hombre armado abrió fuego desde una azotea cercana en lo que las autoridades federales describieron como un ataque de francotirador dirigido a agentes de ICE.
García y otro detenido fueron asesinados, y el presunto tirador murió por una herida autoinfligida en la escena.
La carta póstuma reabre preguntas sobre cómo los procesos migratorios siguen activos incluso después de un fallecimiento, y por qué las agencias no detuvieron la aprobación, a pesar de que el solicitante ya no podía beneficiarse de ella.
Para la familia, el documento representa un recordatorio de lo que no fue y un golpe emocional justo antes de las fiestas, registró NBC News.

“Es justo antes de Navidad, y duele porque si él hubiera estado aquí, habría sido todo lo contrario”, dijo Gauffeny. “Habría sido un momento de felicidad”.
Gauffeny, quien dio a luz a su quinto hijo tras la muerte de García, dijo que la aprobación era algo que habían esperado por al menos dos años, con la esperanza de vivir sin miedo a la deportación y construir una vida estable para sus hijos.










