Magic Kingdom, emblemático parque de Disney, tuvo que cerrar temporalmente por presencia de un animal salvaje

Momentos de tensión se vivieron este lunes, 18 de septiembre, en uno de los parques de diversiones más importantes del mundo; Magic Kingdom, en Orlando, Florida, cuando los encargados del lugar se percataron de la presencia de un animal salvaje, más precisamente un oso, que se encontraba trepando en un árbol, en momentos en los que el lugar se encontraba lleno de visitantes.

Si bien el animal no se mostraba agresivo, ni atacó a alguna de las personas presentes en el lugar, los encargados del parque de diversiones dispusieron la evacuación del lugar; de manera temporal, exigiendo a su vez la presencia de los cuerpos de control animal del estado de la Florida, para que estos se encargaran de la orientación, captura y reubicación del oso.

Si bien la amenaza originó alerta en el parque, esta finalmente solo aplicó para algunas de las atracciones próximas a la ubicación del animal, en tanto se teme que el oso acudió al sitio atraído por la comida, en una temporada que tradicionalmente es considerada como la de la acumulación de alimentos de cara al invierno.

Según medios locales, el animal fue observado en inmediaciones de la atracción conocida cómo Big Thunder Mountain Railroad en Frontierland of Magic Kingdom, obligando a la presencia de delegados o funcionarios de la Comisión de Conservación de Vida Silvestre y Pesca de Florida.

Si bien los expertos fueron llamados al lugar con el objetivo de que estos capturaran al oso y lo reubicaran, estos advirtieron a las directivas del parque que la mejor estrategia, y la más segura para los visitantes y el animal, era acoplarse a las dinámicas de este, protegiendo a la concurrencia y permitiendo que el oso se movilizara a su ritmo por el sitio, lo que iba a comprender espacio y tiempo.

Transcurrido algún tiempo, los expertos dispusieron que el parque o las atracciones cerradas, podrían volver a ser abiertas, en medio de un espectáculo que no esperaban los asistentes al lugar, ni mucho menos sus administradores.

Pese a las recomendaciones de los expertos, estos finalmente se vieron obligados a desarrollar un operativo de captura, el cual fue reportado por los medios locales desde las alturas.

Veinte serpientes en una cochera

Recientemente, medios estadounidenses dieron cuenta de la historia de un habitante del Estado de Arizona, quien debió llamar a control animal, luego de la detección de un grupo de serpientes cascabel que se había ‘apoderado’ de su garaje; un espacio oscuro, húmedo y desordenado.

Si bien en el informe inicial del ciudadano, este había advertido que se tratan de tres serpientes cascabel, la presencia de los expertos de control animal permitió determinar que el número de serpientes excedía con creces los cálculos dados por el ciudadano; reportando así la presencia de 20 serpientes, que se habían concentrado en su mayoría en inmediaciones de la base de un calentador de agua ubicado en el lugar.

El parte de las autoridades de control de plagas sentenció que en el lugar hacían presencia al menos cinco serpientes adultas, mientras que las restantes correspondían a crías de serpiente, ascendiendo el total de animales invasores a dos decenas.

En medio de la operación de control, los funcionarios de la empresa de control de plagas compartieron videos del operativo, dando espacio a cientos de comentarios sobre la situación, entre los que se destacan los de aquellos que critican la forma en la que el hombre permitió que anidaran en el lugar tantos animales, describiendo que el ‘desorden’ que se observa en el lugar, fue garantía para ello.

Dentro del balance de la empresa de control de plagas también se detalló que según los registros y pistas hallados en el lugar, se podría pensar que el número de serpientes que llegó a existir en el lugar era de cerca de 40, no obstante algunas no lograron sobrevivir.