Estados Unidos
Persona compró mina en Estados Unidos por 2 millones de dólares y descubrió algo extraordinario en su interior
Una mina de carbón comprada podría valer miles de millones por esta razón.

Podría parecer un guion de película, pero es real: Randall Atkins, exbanquero de JP Morgan y actual director de Ramaco Resources, compró en 2011 una vieja mina de carbón en las afueras de Sheridan, Wyoming, Estados Unidos, por solo dos millones de dólares.
Lo que parecía una inversión modesta en el corazón minero de Estados Unidos terminó convirtiéndose en un hallazgo de proporciones colosales.
La mina Brook, de aproximadamente 15.800 acres (aproximadamente 64 mil metros cuadrados), inicialmente estaba destinada a la extracción de carbón, pero los avances tecnológicos y las investigaciones geológicas revelaron que en sus profundidades se encuentran depósitos de elementos altamente codiciados: galio, germanio, neodimio, disprosio y terbio.

Estos materiales son clave para la producción de tecnologías modernas como baterías, turbinas e incluso armas de precisión, como misiles, según informó El Tiempo.
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Actualmente, geólogos del gobierno federal y expertos de la empresa trabajan para extraer muestras de más de 214 metros de profundidad para comprobar la calidad y cantidad de estos elementos; excavar hasta ese nivel simboliza alcanzar la máxima profundidad en la historia de ese terreno.
La mina podría albergar uno de los yacimientos de tierras raras más importantes del país, aunque todavía se están llevando a cabo estudios preliminares que determinarán la viabilidad del proyecto y los métodos adecuados de extracción y procesamiento.
Una de las principales preocupaciones de los expertos es el impacto ambiental. La mayoría de estos minerales no se encuentra en altas concentraciones, lo que obligaría a realizar grandes movimientos de tierra.
Por eso, cualquier estrategia de extracción deberá considerar la sostenibilidad ecológica del terreno y la protección de los recursos naturales del área.

Si los análisis son positivos, la mina Brook podría convertirse en el primer centro de producción de tierras raras en Estados Unidos en al menos 70 años.
Esta noticia representa una esperanza para quienes temen por la seguridad económica y estratégica del país, puesto que actualmente EE. UU. depende, en gran medida, de la importación de estos minerales.
Ya han pasado más de diez años desde que Atkins compró la mina por apenas dos millones de dólares. Hoy, tras los recientes descubrimientos, su valor podría ascender a unos 37.000 millones de dólares, una cifra extraordinaria que, para ponerla en contexto, equivale aproximadamente al 30 % del presupuesto anual de un país como Colombia.
Este hallazgo podría cambiar el panorama económico del país, la política energética y la seguridad tecnológica a largo plazo, consolidando a Estados Unidos como una potencia también en la minería de alta tecnología.