Qué es la “ley de los 10 años” y por qué genera temor entre migrantes indocumentados en Estados Unidos

La ley de los 10 años en Estados Unidos se refiere a una disposición de la Ley de Inmigración y Nacionalidad (INA, por sus siglas en inglés) que impone una prohibición de reingreso al país a ciertos inmigrantes indocumentados. Específicamente, establece que cualquier persona que haya acumulado más de un año de presencia ilegal en Estados Unidos y luego salga del país tiene prohibido reingresar durante una década.

La presencia ilegal comienza desde el momento en que una persona ingresa a Estados Unidos sin ser admitida o en libertad condicional, o cuando permanece en el país después de la expiración de su período de estancia autorizada. Si una persona acumula más de 180 días, pero menos de un año de presencia ilegal, se enfrenta a una prohibición de reingreso de tres años. Sin embargo, si la presencia ilegal supera un año, la prohibición de reingreso se extiende a diez años.

Implicaciones para los inmigrantes indocumentados

Esta ley tiene profundas implicaciones para los inmigrantes indocumentados que buscan regularizar su estatus migratorio. Muchos procedimientos de ajuste de estatus requieren que el solicitante salga de Estados Unidos para completar el proceso en un consulado o embajada estadounidense en el extranjero. Sin embargo, al salir, aquellos que han acumulado más de un año de presencia ilegal activan automáticamente la prohibición de reingreso de diez años, lo que les impide regresar legalmente al país durante ese período.

Existen exenciones de inadmisibilidad que permiten a ciertos individuos solicitar un perdón por la presencia ilegal acumulada. Estas exenciones están disponibles para personas que puedan demostrar que su ausencia causaría dificultades extremas a un cónyuge o padre ciudadano estadounidense o residente legal permanente. Sin embargo, obtener estas exenciones es un proceso complejo y no está garantizado.

Propuestas legislativas recientes

En un esfuerzo por abordar las dificultades que esta ley impone a muchos inmigrantes, se han presentado propuestas legislativas para modificar las reglas actuales. Por ejemplo, el proyecto de Ley de Registro busca permitir que los inmigrantes indocumentados que hayan residido en Estados Unidos durante al menos siete años puedan solicitar la residencia permanente. De aprobarse, esta ley ofrecería una vía de regularización para millones de personas que actualmente viven en la incertidumbre debido a su estatus migratorio.

Muchos evitan salir del país, incluso cuando es necesario para procedimientos de regularización, debido al riesgo de enfrentar la prohibición de reingreso. Esta situación puede llevar a la separación prolongada de familias y limitar las oportunidades de empleo y educación.

Dada la complejidad de las leyes de inmigración y las severas consecuencias asociadas con la presencia ilegal, es crucial que las personas en esta situación busquen asesoramiento legal especializado. Un abogado de inmigración puede evaluar casos individuales y determinar las opciones disponibles para mitigar o evitar las sanciones asociadas con la ley.

Si bien existen mecanismos para solicitar exenciones, el proceso es complejo y no garantiza resultados favorables. Las propuestas legislativas actuales ofrecen una esperanza de reforma, pero hasta que se implementen cambios, es esencial que las personas afectadas busquen asesoramiento legal adecuado para navegar las complejidades del sistema migratorio estadounidense.