Un barco pesquero comercial fue consumido por las llamas en aguas profundas del Golfo de México, a unas 100 millas náuticas al oeste de Clearwater, Florida.
Su único tripulante permaneció aislado en una balsa salvavidas hasta que una operación de búsqueda y rescate de la Guardia Costera de Estados Unidos (USCG) lo localizó y puso a salvo, destacando la importancia de los equipos de emergencia en altamar.

Rescate en altamar: la respuesta de la Guardia Costera
La emergencia se activó cuando una radiobaliza de localización de emergencia (EPIRB) del barco emitió una señal de auxilio al centro de operaciones de la Guardia Costera, que coordina los rescates en el sureste marítimo de Estados Unidos.
La baliza EPIRB, diseñada para transmitir coordenadas precisas a través del sistema de satélites de búsqueda y rescate, es reconocida internacionalmente por su fiabilidad en situaciones críticas lejos de la costa.
Como se registra en una publicación de Maritime Executive, ante esa señal, un helicóptero de búsqueda y rescate MH-60 Jayhawk fue despachado desde la estación aérea de Clearwater para localizar al navegante en peligro.
A su llegada, la tripulación aérea identificó la embarcación incendiada y al hombre en una balsa salvavidas en medio del Golfo, en condiciones marítimas moderadas que aun así complican las maniobras de aproximación aérea.
Un rescatista fue descendido desde el helicóptero para asegurar al navegante y elevarlo a bordo sin lesiones significativas, completando una operación que las autoridades describieron como eficiente y ejecutada con precisión bajo presión.
Las balizas EPIRB, al proporcionar una localización inmediata y confiable, son un factor clave para este tipo de rescates lejos de la costa.
Incendio en altamar: investigación y prevención
Las causas precisas del incendio no se han hecho públicas, y la investigación está a cargo de la misma Guardia Costera, con el objetivo de esclarecer si fallas mecánicas, eléctricas u otros factores operativos provocaron el fuego.
Conforme a la misma publicación en mención, este tipo de incidentes en barcos pesqueros, aunque poco frecuentes, constituyen uno de los riesgos más graves para las embarcaciones comerciales, debido a la combinación de motores potentes, combustibles y espacios reducidos.
Fuentes oficiales han subrayado que contar con dispositivos de emergencia homologados y en buen estado, como las balizas EPIRB, puede marcar la diferencia entre una tragedia y un rescate exitoso, especialmente cuando las circunstancias obligan a abandonar una embarcación en alta mar.

La operación reafirma el papel de la Guardia Costera en misiones de búsqueda y rescate en el Golfo de México, donde cada año se desarrollan múltiples intervenciones para proteger la vida humana en la mar.










