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Temporada de huracanes 2025: la NOAA advierte que será por encima de lo habitual. Algunos alcanzarían la categoría mayor a 3
Con temperaturas oceánicas inusualmente altas y condiciones atmosféricas propicias, expertos advierten una temporada ciclónica más activa de lo normal en el Atlántico

La temporada de huracanes del Atlántico 2025 arrancará oficialmente el 1 de junio y se perfila como otra de actividad por encima de lo normal. Según el pronóstico más reciente de la Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica (NOAA, por su sigla en inglés), existe un 60 % de probabilidad de que se registre una temporada por encima de lo habitual, con entre 13 y 19 ciclones con nombre, de los cuales 6 a 10 podrían convertirse en huracanes y entre 3 y 5 alcanzar categoría mayor a 3 según la escala.
Este panorama activo responde a varias señales de alerta en el océano y la atmósfera. El Centro de Predicción del Clima de la NOAA (CPC) indica que se mantendrá un ambiente tenso-neutral durante el verano boreal (junio-agosto) con 74 % de probabilidad, condiciones que no limitan la formación de sistemas tropicales como sí lo haría El Niño.
Así mismo, las temperaturas de la superficie del mar en el Atlántico tropical y el Golfo de México continúan por encima de su media histórica, aportando más energía a las tormentas en gestación.

La Universidad Estatal de Colorado (CSU), bajo la dirección del experto Phil Klotzbach, proyecta que el índice de Energía Ciclónica Acumulada (ACE) para 2025 alcanzará aproximadamente el 125 % del promedio registrado entre 1991 y 2020. Su pronóstico incluye 17 tormentas con nombre, 9 huracanes y 4 de categoría mayor.
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Además, advierten que la probabilidad de que al menos un huracán de gran intensidad impacte territorio estadounidense es más alta que el promedio histórico, lo que refuerza la necesidad de estar preparados, incluso si solo se presenta un evento de gran magnitud.
Más allá de los números, mejoran las herramientas de pronóstico. Para 2025, la NOAA implementará una actualización de su Hurricane Analysis and Forecast System (HAFS) que promete mejorar la precisión de los modelos en un 5 % adicional. Gracias a avances en la asimilación de datos satelitales y aéreo-flotantes, los pronósticos a cuatro días hoy son tan fiables como los de dos días hace veinte años.
Pese a estos avances científicos, la NOAA enfatiza que la preparación individual y comunitaria es clave. Cada hogar costero debe revisar planes de evacuación, asegurar provisiones e identificar rutas seguras.
Las administraciones locales, por su parte, deberán reforzar la infraestructura y mantener actualizadas las alertas tempranas. Un solo huracán de gran magnitud basta para generar pérdidas multimillonarias y poner en jaque servicios básicos.

Históricamente, temporadas con cifras similares han dejado lecciones valiosas. La NOAA recuerda el impacto del huracán Beryl de 2024, el primero en alcanzar categoría 5 tan temprano en la temporada, y advierte que los registros recientes no garantizan calma futura. En un escenario de cambio climático, el nivel del mar más alto y la subida de temperaturas marinas elevan el riesgo de inundaciones costeras y marejadas ciclónicas.
Con el inicio de la temporada cada vez más próximo, el mensaje es claro: huracanes 2025 será intenso y no admite descuidos. Para periodistas y gestores de riesgos, la tarea es difundir información oportuna y contrastada.
Para la población, entender que incluso un solo ciclón fuerte puede cambiarlo todo. Solo la sumatoria de ciencia, comunicación y prevención podrá minimizar el impacto de lo que se prevé como otra temporada muy activa.