Una combinación de fuertes ráfagas de viento, vegetación seca y líneas eléctricas derribadas desencadenó la noche del miércoles una serie de al menos nueve incendios simultáneos en el condado de Yuma, Colorado.
El fuego ha obligado a evacuaciones, cortes de energía y esfuerzos de respuesta de emergencia, mientras las autoridades luchan por contener el fuego más grande, que ha consumido decenas de miles de acres de pastizales y campos agrícolas.
Evacuaciones, cortes de energía y un incendio principal fuera de control preocupan a las autoridades
En la noche del 17 al 18 de diciembre de 2025, ranchos, pastizales y zonas rurales del condado de Yuma, en el extremo noreste de Colorado, se vieron envueltos en un escenario de emergencia sin precedentes.

Las autoridades locales informaron que, en medio de vientos fuertes, han surgido múltiples focos de incendios, con hasta nueve igniciones reportadas en distintos puntos del condado.
Esto ha generado una situación extrema que alerta por la capacidad de expansión de los fuegos ante condiciones atmosféricas adversas, como se informa en Denver 7 Colorado News.

Vientos extremos y vegetación seca desatan múltiples incendios en zonas rurales
La causa inicial de estos incendios, según indicaron funcionarios del Yuma County Office of Emergency Management, parece estar relacionada con líneas eléctricas derribadas por la fuerte acción del viento.
Estas rompieron cables y pudieron generar chispas en vegetación extremadamente seca, propiciando el inicio de los múltiples focos.
El fuego más significativo se localiza al sur de Eckley, en terrenos rurales cercanos al vecindario de Heartstrong, donde las llamas han arrasado cerca de 40,000 acres (aproximadamente 16,000 hectáreas).
Aunque la mayoría de los incendios menores han sido ya controlados o combinados por las brigadas, este foco principal todavía está activo en las primeras horas de la mañana.
Autoridades de emergencia emitieron órdenes de evacuación para residentes de áreas amenazadas por el avance del fuego.
Se habilitaron centros de refugio en escuelas y centros comunitarios, incluyendo la Yuma High School, Wray EMS y el Grassroots Center en Joes, aunque muchos de estos refugios cerraron, ya que la amenaza inmediata disminuyó con el avance de la madrugada, como lo informó Denver 7 Colorado News.
Además de los incendios, la situación de viento extremo ha afectado la infraestructura eléctrica y otros servicios básicos.
Parte de la ciudad de Yuma quedó sin energía, y los pronósticos meteorológicos indicaron que las ráfagas podrían continuar, elevando el riesgo de nuevos incendios o la reactivación de focos controlados.
El Servicio Meteorológico Nacional (NWS) mantuvo advertencias de red flag warning (alerta roja de incendio) para las llanuras orientales de Colorado, señalando que los vientos sostenidos y las ráfagas, combinados con baja humedad y vegetación seca, presentan condiciones ideales para una propagación rápida de incendios y un comportamiento errático de las llamas.
También se emitieron alertas de calidad del aire por humo, afectando la salud respiratoria de las poblaciones rurales y de tránsito en zonas cercanas a las rutas interestatales.

El alcalde de Yuma describió el evento como una “experiencia aterradora” para una comunidad pequeña con recursos limitados, destacando que, de haberse desplazado de manera más agresiva, los incendios podrían haber amenazado directamente la ciudad.










