Alias el Costeño, cerebro del atentado contra Miguel Uribe Turbay, tenía una barbería en su barrio. Así era Capital Barber Shop

La vida de alias Chipi o alias el Costeño es hoy objeto de una investigación profunda por parte de la justicia. El hombre es señalado de ser el jefe sicarial detrás del atentado contra Miguel Uribe Turbay. Múltiples pruebas y testimonios dejan en evidencia que su participación fue determinante en el crimen que tiene hoy al senador del Centro Democrático en un delicado estado de salud.

Los videos y los relatos de las personas que han sido capturadas hasta hoy dan cuenta de cómo este hombre fue el encargado de planear y ejecutar el atentado, también de dirigir a los demás participantes y luego de planear la huida.

SEMANA reveló cómo las autoridades han encontrado pistas en el barrio El Muelle, un lugar ubicado muy cerca del aeropuerto El Dorado, en la localidad de Engativá.

“Hay varios negocios de barberías y en algunos de ellos trabajó alias el Costeño, quien detrás de esa fachada manejaba negocios de microtráfico. En esa misma zona, vivía el menor de solo 15 años que atentó contra Miguel Uribe Turbay”, registra el reportaje exclusivo de SEMANA.

El diario El Colombiano recorrió el barrio. Y asegura que el nombre de este negocio fue Capital Barber Shop. “Las fotografías de la cuenta de Instagram que todavía está abierta lo muestran a él haciendo varios trabajos. Allí aparece posando junto a clientes y colegas barberos y exponiendo sus tatuajes de las manos y brazos. En la mano izquierda tiene un tatuaje que dice ‘familia’. Hay otros videos en donde está haciendo cortes a personas que lo iban a buscar", narra la publicación.

Según cuentan en su relato, el local era grande y estaba bien ordenado. Una mujer que trabaja en una droguería cercana le contó a ese diario que se trata de un conocido del sector. “Sí, yo lo recuerdo porque tenía una barbería cerca. Todo el mundo aquí le decía Chipi”.

“Yo trabajé con él hace unos años en la barbería y cuando vi la foto no lo podía creer. Él era el dueño, pero no se la pasaba ahí. Él llegaba, hacía unos cortes y se iba. Por las noches la esposa era la que nos cobraba los cortes. Me parecía imposible de creer. Una persona de la barbería me envió el post y lo reconocí de una. Él pasaba con su familia ahí, después me enteré de que había peleado con la esposa, se había ido a vivir solo y estaba por ahí. A esa barbería llegaba tanta gente que por eso me fui para un pueblo más tranquilo. Cuando nosotros trabajamos con él no tenía los tatuajes en el cuello, pero sí los de los brazos.”, agregó otro hombre a El Colombiano.

Del Costeño, las autoridades han tenido rastros desde los primeros momentos del atentado. Pero su papel queda totalmente claro en el testimonio que le entregó alias Gabriela a las autoridades. El hombre fue el encargado de coordinar todo el proceso del atentado, desde contratar a las personas que iban a participar, incluido el menor de edad, hasta el conductor y a la joven de 19 años que fue encargada de llevar el arma.

Alias Chipi estuvo presente ese día y fue el que cargó el arma con la que le dispararon al senador. Luego, él pensaba dar de baja tanto al menor de edad como al conductor, y le dijo a alias Gabriela que se fuera para Caquetá, donde la guerrilla iba a capacitarla en drones y sicariato como francotiradora.

Esa pista es la que más apunta hoy a los autores intelectuales del caso.