Álvaro Uribe parecía muy contento con la candidatura de Liliana Rendón. Ahora lo pone en aprietos con su propio partido, y con los periodistas. | Foto: Archivo particular

ELECCIONES 2015

El silencio de Uribe sobre Liliana Rendón

En video quedó registrada la reacción del expresidente, muy incómodo, cuando le preguntaron por la candidata a la Gobernación de Antioquia.

7 de julio de 2015

Nada ni nadie hará que Liliana Rendón renuncie a su aspiración a la Gobernación de Antioquia. Ni siquiera que un grupo de congresistas antioqueños del Centro Democrático haya cuestionado el aval que el movimiento le prometió varios meses atrás. La excongresista se siente tranquila porque asegura que su aval es legítimo. “Trabajé por él, no voy a renunciar y voy hasta el final”, expresó recientemente en su cuenta de Twitter.

El que no parece estar igual de tranquilo es el jefe natural del Centro Democrático, el expresidente Álvaro Uribe, para quien el tema de Liliana Rendón es cada vez más espinoso, o por lo menos se le está convirtiendo en un asunto muy difícil de capotear.

Eso pareció quedar en evidencia en una reciente visita que hizo a Medellín. Un periodista del portal Minuto 30 le preguntó sobre el binomio entre Liliana Rendón, candidata a la Gobernación, y Juan Carlos Vélez, aspirante a la Alcaldía de Medellín.

Uribe, quien en su época de presidente hizo célebre la expresión “siguiente pregunta, estimado periodista” cuando lo sorprendían con incómodos interrogantes, o que tenía la habilidad de salir del paso con respuestas que no correspondían con la pregunta, esta vez guardó silencio y con un sutil gesto convenció al reportero de no hablar sobre Liliana. En cambio, se explayó en elogios sobre el candidato Juan Carlos Vélez.




La salida del expresidente podría ser anecdótica. Pero el hecho de que guardara silencio y no metiera las manos al fuego por Liliana, en estos días convulsos para la excongresista, puede ser interpretado de otra forma.

Aunque Liliana recorre los municipios del departamento con la imagen institucional del ‘Centro Democrático, Mano firme corazón grande’ como respaldo, y en sus correrías de comienzo de año contó con la compañía de Uribe, pareciera que el aval del partido a su candidatura no estuviera del todo asegurado. De hecho, hasta la fecha, Rendón no ha inscrito oficialmente su candidatura, entre otras porque el Centro Democrático aún no le ha entregado el aval.

Por dos veces, el Centro Democrático se ha visto obligado a posponer la asamblea del partido en Antioquia, aduciendo temas logísticos, pero evidentemente por la división que hay en el movimiento frente a la candidatura de Liliana Rendón. En esa Asamblea se tiene previsto aclamar a sus principales candidatos, tanto a la Gobernación como a los demás cargos de elección popular en el departamento.

El interrogante que surge es si el Centro Democrático puede negarle el aval a Rendón. Probablemente el expresidente Uribe evada la respuesta. Pero el hecho de que cinco parlamentarios del movimiento hayan exigido buscar otro candidato abre las puertas a esta posibilidad.

Sin embargo, en las toldas de Liliana aseguran que esta decisión no tiene reversa. El abogado Carlos Mario Cano, asesor jurídico de la campaña, dice que legalmente el Centro Democrático le debe entregar el aval, pues el partido aprobó un procedimiento el pasado mes de marzo y estableció que le entregaría el aval para la Gobernación después de unos foros programáticos y de una encuesta. Liliana ganó el sondeo en el que se midió con el otro precandidato, el exdiputado Andrés Guerra. Por eso advierten que lo del aval del uribismo, jurídicamente, se debe entender como un hecho. Y si por razones políticas se lo niegan, habría demandas contra el partido.

En últimas, Liliana Rendón se ha convertido en un asunto complejo al interior del uribismo. Tanto así que el jefe natural del partido, de momento, prefiere guardar silencio.