Nación
Así fue la peligrosa maniobra de un piloto de la mafia para descargar un cargamento de cocaína en aeropuerto de República Dominicana
El sindicado de romper los protocolos aeronáuticos fue capturado en Bogotá por la Interpol.
El relato que entregaron las autoridades de República Dominicana a las autoridades colombianas sobre la peligrosa manobra que hizo un piloto de la mafia en el aeropuerto internacional de la isla parece sacado de una película de Hollywood.
“Dicha aeronave llegó realizando cambio de luces y aterrizó a pesar de no estar en los registros de vuelos, inmediatamente tocó suelo se dirigió a la cabecera de la pista donde no había iluminación y se detuvo allí por espacio de 15 minutos, donde al parecer descargaron el alijo de estupefacientes”, indicó la Policía Colombiana.
Agregó la autoridad policial que: “luego de realizar la maniobra emprendieron la huida”. El arriesgado aterrizaje se dio en el 2017 y quien habría sido el presunto responsable de haber roto los protocolos aeronáuticos sería el piloto colombiano Édgar Armando Burbano Benavides, quien fue captura tras tener sobre su espalda una circular roja de Interpol.
Indicó Interpol Colombia que: “Édgar Burbano es señalado de estar involucrado en el transporte ilícito de drogas desde Colombia hacia el Caribe. Su rol principal consistía en operar aeronaves utilizadas para el tráfico de estupefacientes, facilitando así el envío de cargamentos de cocaína a organizaciones internacionales dedicadas a esta actividad ilegal”.
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Tras las investigaciones de República Dominicana, la publicó de la isla emitió “una orden de arresto y a su vez una notificación roja con fines de extradición en mayo de 2018, por el hecho de estar involucrado en actos relacionados con el narcotráfico y lavado de activos criminales; según la investigación, este era uno de los pilotos que se encargaba de las operaciones aéreas de traslado de drogas hacia ese país”.
En las últimas horas, Burbano fue capturado por Interpol, en un sector exclusivo de Bogotá. “Su papel era clave dentro de la estructura criminal, ya que su experiencia como piloto garantizaba la efectividad de los envíos y el cumplimiento de los acuerdos entre organizaciones criminales”, indicó la Interpol de Colombia.
Agregó la autoridad policial que: “desde el año 2020 había dejado de operar aeronaves comerciales para dedicarse a vuelos chárter en el ejercicio de su profesión, operando aeronaves de ala fija y coordinando vuelos clandestinos, despegando desde pistas no autorizadas o zonas remotas para evitar el control de las autoridades. Además, participaba en la logística del narcotráfico, asegurando que la droga llegara a sus destinos sin ser detectada”.
