Nación
Aterrador: disidencias de las Farc de alias Calarcá habrían incinerado a un militar en el Caquetá; esto es lo que se sabe
El integrante del Ejército se movilizaba en un bus en San Vicente del Caguán, Caquetá.
Un aterrador crimen habrían cometido las disidencias de las Farc de alias Calarcá, en el departamento del Caquetá, en contra de un integrante del Ejército.
Fuentes militares indicaron que existe una alta probabilidad de que el cuerpo calcinado de una persona que viajaba en un bus intermunicipal que cubría la ruta de San Vicente del Caguán, sea el de un suboficial.
Los hechos que se han conocido preliminarmente, indican que hombres fuertemente armados interceptaron el bus, obligaron a los ocupantes a bajarse del automotor al que le prendieron fuego.
Sin embargo, se ha establecido que dentro del bus fue encontrado un cuerpo calcinado, el cual, —presuntamente— sería el de un sargento, quien viajaba de civil luego de visitar a su esposa, una militar que estaba en el batallón Cazadores.
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De acuerdo con las autoridades militares, al sitio de los hechos se trasladó policía judicial para realizar el levantamiento del cadáver y trasladarlo a Medicina Legal y que dicha entidad establezca la identidad de la persona asesinada en la acción terrorista.
El reporte interno de la fuerza pública indica que: “Siendo aproximadamente las 18:00, la esposa del sargento informa que el mencionado suboficial tomó un bus de la empresa Cootranscaquetá en la ruta San Vicente del Caguán a Bogotá, el cual fue incinerado a dos kilómetros del puente Riecito vía Puerto Rico -Caquetá, perdiendo comunicación con sus familiares, desconociéndose su ubicación actual”.
Es de recordar que las disidencias de las Farc de Calarcá se encuentran en negociaciones de paz con el Gobierno del presidente Gustavo Petro.
En medio de las negociaciones, hace unos días, hombres de Calarcá emboscaron una unidad militar en Guanapalo, Guaviare, asesinando a siete militares.
Los uniformados estaban saliendo de la zona para ir a sus hogares y disfrutar de un periodo de descanso cuando a su paso les salieron unos 80 hombres de Calarcá.
Luego de un combate de al menos dos horas y sin recibir apoyo del Ejército, se confirmó el asesinato de los militares a manos de los hombres de Calarcá.
En la región del Guaviare, donde se presentó el crimen de los uniformados, delinquen las estructuras de Calarcá y de Iván Mordisco. Como es de público conocimiento, estos dos cabecillas eran socios, pero luego se dividieron y entraron en guerra.
En la población de Guanapalo, sus habitantes viven con temor por las constantes confrontaciones y amenazas de los grupos al margen de la ley.
