Invierno
Boyacá declara emergencia por devastadora ola invernal: 32 municipios en calamidad pública
La emergencia ha generado daños significativos en infraestructura vial, viviendas y redes de servicios públicos.
La emergencia climática que atraviesa Colombia por cuenta de la intensa ola invernal ha golpeado con fuerza al departamento de Boyacá. Ante el panorama de afectaciones crecientes, el gobernador Carlos Andrés Amaya declaró en emergencia absoluta a todo el territorio boyacense, luego de que 32 de los 123 municipios del departamento activaran formalmente el estado de calamidad pública.
La medida se tomó en el marco de un sobrevuelo de evaluación realizado este sábado por el gobernador, en compañía del director de Gestión del Riesgo de la Defensa Civil, coronel Pérez, y expertos de la Universidad Pedagógica y Tecnológica de Colombia (UPTC).
“Hemos tomado una decisión unánime de decretar en el departamento de Boyacá la calamidad pública a raíz de la emergencia por la ola invernal. Las fuertes lluvias han llevado a que hoy 32 municipios del departamento hayan decretado una calamidad pública. La situación es lamentable, dolorosa, difícil, y hoy todos nos unimos en una tarea conjunta de atender con urgencia la emergencia que se nos presenta”, declaró Amaya.
La administración departamental les ha solicitado al Gobierno Nacional y a la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD), liderada por Carlos Carrillo, una respuesta inmediata con ejecución directa de recursos. Amaya fue enfático en señalar que no busca transferencias de dinero al departamento, sino acciones concretas por parte del Gobierno central.
“Le pido al Gobierno nacional no le gire ni un solo centavo al departamento de Boyacá. Lo que necesitamos es que ejecuten recursos que permitan, por ejemplo, la contratación del arrendamiento en el municipio de Socotá para 143 familias, la construcción de puentes nuevos —necesitamos 46 mil millones en eso—, más de 10 mil millones para puentes que están a punto de caer, y más de 30 mil millones para puntos críticos en vías que no pueden seguir deteriorándose”, añadió el mandatario.
La emergencia ha generado daños significativos en infraestructura vial, viviendas y redes de servicios públicos, así como aislamiento de comunidades rurales. A pesar de la gravedad de la situación, Amaya destacó que no se han registrado víctimas mortales en el departamento, un dato que considera resultado del trabajo articulado entre las autoridades y la ciudadanía.
“Gracias de todo corazón a la Policía, al Ejército, a la Cruz Roja, a la Defensa Civil, a Bomberos, a cada una de las autoridades que hacen parte de este comité de gestión de riesgo. Entre todos, con fe, confianza y trabajo duro, saldremos adelante”, expresó el gobernador.
Un contexto nacional crítico
La emergencia en Boyacá se suma a la crítica situación que enfrenta el país por la actual ola invernal. De acuerdo con la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo, 27 de los 32 departamentos han registrado emergencias, con más de 17.000 familias afectadas y 23 personas fallecidas a lo largo del territorio nacional.
Departamentos como Cundinamarca, Antioquia, Valle del Cauca y Nariño también han declarado la calamidad pública, y se estima que los daños materiales alcancen cifras multimillonarias.
El Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam) ha advertido que las lluvias persistirán hasta el mes de junio, con niveles de precipitación superiores al 50 % del promedio histórico, lo que mantiene en alerta máxima a las autoridades locales y nacionales.
