El caso de la empresaria Zulma Guzmán sigue llamando la atención en Colombia y el mundo. A pocos días de su arresto ahora se conoce el testimonio de Alejandro Herrera, amigo cercano de una de las madres de una de las niñas que falleció tras haber ingerido unas frambuesas envenenadas con talio, las cuales habrían sido enviadas presuntamente por la empresaria.
El testimonio, dado en el programa Los informantes de Caracol Televisión, pinta un retrato de sufrimiento silencioso que podría conectar con el crimen que investiga la Fiscalía.


La tragedia estalló en abril de 2025, cuando dos niñas de 13 y 14 años murieron tras consumir frambuesas contaminadas con talio, un veneno altamente tóxico.
Últimos días de vida

Tras conocerse la captura de Zulma Guzmán en Londres, un amigo de la madre de una de las niñas fallecidas dio un revelador testimonio. El amigo, llamado Alejandro Herrera, quien vive en Francia, recordó en Los informantes cómo vio a su amiga Alicia en el verano de 2021. “Destrozada, cansada y decaída”, la describió, pesando apenas 40 kilos tras superar un cáncer de seno. Ella y su esposo, padre de la niña víctima, llegaron a su casa tras un viaje fallido a Italia por el covid-19.
El 14 de julio de 2021, fecha de la visita a la casa de Alejandro, él insistió en llevarla a urgencias, pero el esposo lo rechazó: “No, ella no quiere ir a eso, nosotros nos devolvemos”. Un mes después, la mujer murió el 17 de agosto de 2021 a los 50 años y fue cremada, impidiendo análisis toxicológicos actuales.

Más hallazgos

Tras las muertes de las menores de edad, el 13 de abril de 2025, Guzmán salió del país rumbo a Argentina, donde se movió libremente hasta agosto, cuando anunció radicarse en otro país. Posteriormente, viajó por Brasil, España y Reino Unido.
El 25 de octubre, un juez de Bogotá ordenó la captura e Interpol emitió circular roja. Su rastro se perdió hasta que un descuido delató su ubicación en Londres.

El 17 de diciembre de 2025, a las 6:45 a. m., policías londinenses rescataron a una mujer del río Támesis en el puente de Battersea. Era Zulma Guzmán, de unos 50 años, consciente y estable tras atención hospitalaria. Medios británicos como The Sun reportaron el incidente, posiblemente un intento de suicidio no confirmado.
Hoy, permanece bajo custodia en un hospital del Reino Unido, a la espera de evaluación para deportación o extradición a Colombia, un proceso que podría durar ocho meses a un año. La circular roja de Interpol fue retirada tras su captura, y enfrentará audiencia por extradición si está apta. Guzmán sigue negando responsabilidad.








