Nación
El millonario robo a Ecopetrol del que habla el presidente Petro. Le incautaron bienes avaluados por más de 1,3 billones de pesos a “gente de bien”
Entre las propiedades se encuentran barcos, edificios y carros de lujo, ligados a 40 empresas que se declaran inocentes.
El escándalo que significó una compleja operación en la que, con apoyo del ELN, eran extraídos miles de barriles de petróleo directamente del oleoducto Caño Limón-Coveñas de Ecopetrol, para ponerlos en un gigantesco buque en alta mar, mezclarlo con operaciones legales, darle esta apariencia y luego venderlo de nuevo a Ecopetrol, generó la reacción del presidente Gustavo Petro.
“Esta investigación de la Dijín muestra uno de los mayores robos al estado colombiano. Se robaron cerca de 80 millones de dólares en petróleo y los delincuentes eran ‘gente de bien’ de los sectores más pudientes del país. Debe investigarse si el robo contó con apoyos al interior de Ecopetrol”, dijo el presidente Petro.
Las autoridades investigan un complejo entramado empresarial, que se habría prestado para darle apariencia de legalidad al robo continuado a Ecopetrol, alcanzando las ganancias fraudulentas que plantea el mandatario.
La investigación
Luego de un arduo trabajo con interceptaciones telefónicas, fotografías satelitales, entre más material probatorio, se logró la incautación de bienes de por lo menos 17 empresarios colombianos.
Tendencias
Las compañías de estos empresarios están involucradas en una investigación transnacional, la cual en Colombia incluye dos procesos. Uno criminal y el otro de extinción de dominio, notificado el 18 de mayo pasado.
La incautación de barcos, un lujoso edificio en Cartagena, carros de lujo, megalotes, casas de veraneo y demás bienes, que ocurrió en cinco departamentos de Colombia, está avaluada en más de $1,3 billones.
Así mismo, continúa el proceso de acusación contra los empresarios por los delitos de concierto para delinquir, apoderamiento de hidrocarburos y falsedad en documento privado. Esto se da luego de una larga investigación de hombres de la Dijín que desenmascararon una gigantesca operación criminal con petróleo que era hurtado desde los mismos oleoductos.
El proceso de investigación empezó con las misteriosas entradas y salidas de buques petroleros con bandera panameña, que se cargaban en puertos de la costa Caribe y tenían como destino Singapur, Ámsterdam y otros lugares en Asia y Europa.
Las agencias de inteligencia reportaron al país una carga equivalente a un millón de barriles de petróleo colombiano por mes, que costaban cerca de USD 10 millones, pero no figuraban en los registros de exportaciones.
En ese sentido, según los cálculos de los investigadores, que analizaron la operación continuada de hurto de petróleo, se trataba de más 20 camiones cisterna, con capacidad para 12.000 galones, que se cargaban con petróleo venezolano en Maracaibo, Cabimas y La Raya en el estado Zulia (Venezuela).
Posteriormente se llevaba hacia Colombia y se mezclaba con el que se obtenía ilegalmente del oleoducto Caño Limón-Coveñas, perjudicando de esta manera las finanzas de Ecopetrol, que aparece como víctima dentro del proceso con Cenit, y Swiss Terminal Barranquilla S.A.S.
Así las cosas, se utilizó el nombre de varias empresas legales, con reconocimiento en el sector de transporte, almacenamiento y exportación del crudo, para evitar sospechas.
Entre las empresas que aparecen en el expediente está Gunvor Colombia S.A.S., una sucursal de la multinacional Gunvor Group con matriz en Ámsterdam, que se dedica a los negocios de energía y al comercio, transporte y depósito de productos petrolíferos.
La sede de la compañía en Bogotá registra activos por $ 381.000 millones y su representante es el empresario Jaime Alejandro Hoyos Juliao, quien posee una participación en una casa de veraneo en Anapoima (Cundinamarca), comprada en octubre de 2021 por $ 801 millones, que también fue incautada.
La investigación con la cual se está judicializando a los protagonistas de este megarrobo señala que Gunvor Colombia comercializó internacionalmente el crudo de la investigación luego de haberlo recibido a Niman Commerce S.A.S., su proveedor.
Esta última compañía aparece representada por Hernando Silva Bickenbach, miembro de una prestigiosa familia colombiana y catalogado como uno de los principales dinamizadores de la compra, venta y recepción de hidrocarburos bajo investigación.
Según la investigación, esta empresa tiene un gran músculo financiero, por lo que, por medio de Niman Commerce S.A.S., puede ser el principal comprador de hidrocarburos provenientes de organizaciones sin autorización para su comercialización.
El proceso también llevó hasta Aceicar Ltda., en Cartagena, empresa a la que se le encontró un establecimiento comercial avaluado en $ 1.400 millones, sumado a un edificio de 12 apartamentos con un valor cercano a los $ 1.240 millones y 13 camiones.
Otras empresas involucradas en el proceso son Australian Bunker Suppliers C.I. S.A.S., cuyos activos superan los $ 105.594 millones, y a la que se le incautó un apartamento en el sector de Bocagrande, en Cartagena, y tres barcos: Matilda, Blas de Lezo y Marinse I.
Además de Exportécnicas S.A.S., con una camioneta Porsche Cayenne, verde jet, avaluada en $ 260 millones; junto con 24 tractocamiones tipo volquetas y vehículos cisterna; 3 lotes en Tolima y un establecimiento de comercio en Ibagué de $ 6.173 millones.