ELECCIONES 2018
Lizarralde, segundo ministro de Santos que salta a la otra orilla
El exministro de Agricultura se inscribe como precandidato presidencial en el Partido Conservador y apoya la coalición de centro derecha de Uribe y Pastrana.
Cuando la baraja de candidatos presidenciales ya completa una veintena de nombres, el de Rubén Darío Lizarralde no estaba en las cuentas de nadie. El tercer ministro de Agricultura del gobierno de Juan Manuel Santos sorprendió a propios y extraños al lanzarse al agua, este miércoles se inscribió como precandidato del Partido Conservador al que quiere conducirlo hacia la coalición de centro derecha, la que promueven los expresidentes Andrés Pastrana y Álvaro Uribe. Es decir, recorrerá la orilla opuesta de la que representa Santos, su antiguo jefe.
Lizarralde, en campaña, será el segundo ministro de Santos que marcará distancia frente a su Gobierno. El otro ya se lanzó por firmas, Juan Carlos Pinzón. “Fui leal hasta el último minuto, pero por haber estado allí (en el Gobierno) las acciones en el futuro no están hipotecadas”, dijo el hoy precandidato en diálogo con Semana.com.
Foto: Carlos Julio Martínez / SEMANA
Recuerda que llegó al ministerio de Agricultura (el 11 septiembre 2013) por su experiencia en el sector privado, pertenecía a la junta directiva de Fidupalma, que agremia al sector de los palmicultores. Y según su relato para poner en marcha un proyecto que califica de exitoso, pues permitió a tres mil familias campesinas hacerse propietarias de varios predios. “Cuando Santos me invita a hacer del gobierno la única razón era establecer ese esquema. Llegué a colaborar en ello”, le dijo a SEMANA.
En video: Rodrigo Pardo entrevista a Juan Carlos Pinzón
"Los negociadores de La Habana se opusieron a la unión del gran capital con pequeños campesinos. Me fui del Gobierno"
Eran días álgidos para el proceso de paz de La Habana, y en Colombia el debate electoral, en el que Santos aspiraba a la reelección, ya era efervescente. “Pero los negociadores de La Habana –dice- se opusieron a la unión del gran capital con pequeños campesinos, una llave que nos obliga a ayudar los grandes a los pequeños, hacernos grandes en la unidad. No se dio. Salí del gobierno”.
Después de que Santos ganó la reelección, Lizarralde ya no estaba en el gabinete. “Soy respetuoso de lo que ha hecho el presidente, pero muchísimas cosas que ha hecho no las comparto”, dice marcando diferencia.
Por ejemplo, las dos reformas tributarias “han sido fatales”. Y dice que cuando los mismos empresarios empiezan a quejarse y los resultados no son positivos los que generan empleo, la economía no marcha.
"Soy respetuoso de lo que ha hecho el presidente, pero muchísimas cosas que ha hecho no las comparto".
Lizarralde también marca distancia frente al proceso de paz. “Al país le hizo mucho daño el desconocimiento del No (en el plebiscito). Fue desconocer la voluntad del pueblo y después empoderar al Congreso como representante de la voluntad del pueblo fue manosear las reglas de juego que se habían establecido cuando yo estaba en el gobierno. Hoy a los colombianos nadie nos puede decir cuál es la constitución que nos rige, si la del 91, el acuerdo de paz con las Farc que hacen parte integral de la Constitución. No hay seguridad jurídica”, dice.
Asegura que de llegar a la presidencia de la república no “hará trizas” los acuerdos de paz con las Farc, pero sí los revisaría. “Llamaría a un gran acuerdo nacional porque hoy vemos que el país está fracturado. El país no se acercó a un proceso que le diera legitimidad a las decisiones. Hay que buscar ese gran acuerdo nacional. Reajustar el acuerdo para que las partes se acerquen. No comparto eso de hacerlos trizas, pero sí ajustes importantes”.
"No comparto eso de hacer trizas los acuerdos, pero sí ajustes importantes"
Lizarralde, nacido en Buga (Valle del Cauca) se define como un outsider de la política tradicional. Y el hecho de no estar en el radar de presidenciables lo considera un escenario “interesante”. Aunque su trayectoria se ha concentrado más en el sector privado, antes de ser ministro de Agricultura fue secretario de Hacienda de Andrés Pastrana en la Alcaldía de Bogotá (1988-1990), y participó en la campaña presidencial de Marta Lucía Ramírez en el 2010. “He sido conservador toda la vida”, reivindica. Y podría disputarse la candidatura con Ramírez, a quien califica como “una mujer extraordinaria, tiene mucho que aportarle al país”. Para el exministro “será un pulso interesante” competir por esa candidatura.
A los conservadores les dice que hay que tener candidato, para no seguir los caminos de “disolución” que le augura al Partido de la U que “siendo partido de gobierno no puede presentar fórmula presidencial. Los congresistas conservadores deben entender que por ese camino no van mantener su representación en el Congreso”.
"No me siento cerca de los Verdes, del Polo, de las Farc. Creo que desde el centro derecha vamos a recobrar un orden".
Al igual que Marta Lucía Ramírez, Lizarralde propone al Conservatismo hacer parte de la coalición de centro derecha que promueven Uribe y Pastrana, a pesar de que durante siete años los azules han estado en la Unidad Nacional de Santos.
“No me siento cerca de los Verdes, del Polo, de las Farc. Creo que desde el centro derecha vamos a recobrar un orden, una disciplina, un reordenamiento del sistema legal y jurídico. El mundo se está convulsionando y vamos a terminar en un caos que no le conviene a nadie, seguramente a la izquierda”, asegura Lizarralde.
Con su candidatura, Lizarralde se suma al grupo de vallunos que busca la presidencia entre los azules pues allí también tiene aspiraciones el ex gobernador Ubeimar Delgado. De esa región, Carlos Holmes también busca su espacio en el Centro Democrático. La salida política de Lizarralde soprende a algunos de sus ex colegas de la Casa de Nariño, pero no conmociona a nadie. A diferencia de lo que sucedió con Juan Carlos Pinzón, cuando Santos afirmó que la lucha por el poder "saca lo peor de la condición humana", con su ex de Agricultura, el tema no pasará a mayores.
Las aspiración de Lizarralde no cuenta con pleno respaldo de los congresistas conservadores. Unos han hablado con él, otros prefieren iré en coalición pero no con el Centro Democrático. En ese escenario la candidata natural sería Martha Lucía Ramírez, pero su relación con las bancadas se ha resquebrajado. En esa cita los conservadores decidirán si, como Lizarralde, se van a la orilla opuesta a la del presidente Santos.