En imágenes: así fue la llegada de Salvatore Mancuso a Colombia, después de estar más de 15 años preso en Estados Unidos

En la tarde de este martes 27 de febrero, el exparamilitar Salvatore Mancuso llegó a Colombia luego de cumplir su pena en los Estados Unidos. En imágenes que fueron compartidas por la Policía Nacional, institución que recibió al exjefe paramilitar, se le ve fuertemente custodiado con un chaleco antibalas y un casco de combate, objetos con los que se busca preservar su vida.

Mancuso arribó al Aeropuerto El Dorado, en la ciudad de Bogotá, hacia las 2:10 p. m. Desde el momento en el que su vuelo aterrizó, funcionarios de Migración y uniformados de la Policía lo estaban esperando para dar inicio al proceso migratorio.

En algunas fotografías se le observa realizando el respectivo trámite con Migración, por lo que firma algunos documentos y pone sus huellas en estos. En otras imágenes, se le ve fuertemente custodiado por varios policías, incluso algunos tienen escudos para proteger, un operativo que se desarrolló desde el preciso momento en el que el exparamilitar piso suelo colombiano tras llegar de un vuelo desde el país norteamericano, donde estuvo preso durante 15 años.

Mancuso no viajó solo, ya que el exjefe paramilitar, quien fue extraditado en mayo de 2008 con otros 13 jefes paramilitares por continuar delinquiendo desde las cárceles pese a haber firmado en acuerdo de paz, fue un deportado común, por lo que voló en un avión del Gobierno de Estados Unidos junto a cerca de otros 100 colombianos que, al igual que él, fueron expulsados de esa nación norteamericana.

Después de que se diera por finalizado el respectivo proceso migratorio, la Policía Nacional le realizó la reseña a Mancuso e hizo la verificación de los requerimientos judiciales, es decir, los delitos por los que tendrá que afrontar a la justicia colombiana.

En algunas fotografías se mostró el preciso momento en el que el ahora procesado fue ingresado a una patrulla de la Policía para, desde la terminal aérea de Bogotá, ser llevado a los calabozos de la Dijín, en el occidente de la capital. Después de que se realice el respectivo trámite, se espera que Salvatore Mancuso sea llevado a un centro carcelario que, según se ha conocido, será La Picota, allí deberá cumplir con las medidas de seguridad mientras se avanza con los casos en su contra.

La carta de Mancuso

Tan pronto pisó tierra en Colombia, el exjefe paramilitar emitió un comunicado en el que hacía referencia a su regreso al país y su disposición de colaborar para contar la verdad sobre el conflicto. En dos páginas dice que se llena de “sentimiento y emociones” en su retorno a Colombia. Advierte que “a pesar” de las medidas que cursan en su contra, está dispuesto a comparecer ante la justicia y cumplir con los compromisos de verdad.

Dijo que renunció a los “intereses” de protección internacional y explicó en tres razones por qué lo hizo. En primer lugar, aseguró que los “vacíos y riesgos” para sus garantías procesales de estar sometido a dos jurisdicciones –JEP y Justicia y Paz–, son mecanismos “legítimos” para un punto de cierre en el conflicto armado, por lo que se pone a disposición de la justicia.

Según pudo establecer SEMANA, en contra de él existen por lo menos 13 requerimientos por parte de salas de justicia y paz de todo el país para que responda por un rosario de delitos, que van desde el concierto para delinquir, terrorismo, secuestro, homicidio agravado, entre otros.

En varias oportunidades, Mancuso ha manifestado su disposición para colaborar con la justicia y esclarecer diferentes hechos que ocurrieron en el conflicto que, muchos años después, todavía no se conocen o están incompletos. Ahora, tras su llegada a Colombia, tocará esperar para ver si el exjefe paramilitar cumple su palabra y revela los secretos que tiene guardados.

Otras imágenes de la llegada de Mancuso