Nación
“Es un circo y una burla”: Jhon Frank Pinchao arremetió contra primera sentencia de la JEP en el caso de las FARC
Para el expolicía que estuvo secuestrado por la guerrilla, la decisión judicial de la Justicia Especial de Paz es una ofensa contra las víctimas.

No paran las críticas a la Justicia Especial de Paz luego de que se conociera la primera sentencia en contra del exsecretariado de las FARC.

Jhon Frank Pinchao, víctima de secuestro de las FARC, rechazó la sentencia y dijo que la decisión de la JEP es un circo. “La recibo (sentencia) con mucha decepción como la reciben millones de colombianos. Esto es una burla al país y es una revictimización a las víctimas de estos delincuentes”, dijo.
Agregó que: “ver a estos delincuentes que los mandan a sembrar flores, mientras que las víctimas siguen desplazadas y pasando necesidades en las ciudades, huérfanos, viudas, mutilados, gente que ha quedado en la ruina por las extorsiones de estos delincuentes”.
“Entonces creo que la justicia está flaqueando y las penas deberían ser verdaderas penas llenas de justicia y no de burla a un país entero, no estuve en las audiencias porque no quería ser partícipe de este circo que se montó a través de la JEP”, manifestó.

Pinchao, entonces suboficial de la Policía, fue secuestrado en 1998 en la toma de Mitú en el Guaviare, durante una de las violentas acciones de la guerrilla de las Farc.
General Mendieta
Quien también cuestionó severamente el fallo de la JEP fue el general (r) Luis Mendieta, también secuestrado por la guerrilla de las FARC.
“Ellos no habían contribuido con la verdad, no habían contribuido con la reparación y, mientras no haya reparación, pues no hay justicia. Por lo tanto, se solicitaba la exclusión de ellos de allí y que se sometieran al juicio para ver si los condenaban a 20 años de prisión”, dijo el general Mendieta en diálogo con SEMANA.
Agregó el oficial retirado: “Por eso se recibe el fallo con asombro, como una bofetada para las víctimas, pero estaba previsto”.

Según comentó, lo otro que preocupa es que “en esas audiencias, representantes de los ministerios y de entidades del Estado les dijeron a las FARC de una oferta institucional de asignación de presupuesto de recursos para que ellos cumplan las penas entre comillas”, es decir que la reparación se realizaría con recursos de los colombianos.
En este caso, se advirtió que la guerrilla de las FARC utilizó durante décadas el secuestro para lograr la financiación de la organización armada de los diferentes bloques que delinquían en varias regiones del país, para forzar un “intercambio humanitario” por guerrilleros que estaban en las cárceles, y para aumentar su política de control social y territorial.