Nestor Humberto Martínez, Fiscal General de la Nación. | Foto: Juan Carlos Sierra

Nación

Exfiscal Martínez no se aguantó que Angélica Lozano lo tratara de tramposo y, con pruebas en mano, la denunció por injuria y calumnia

La senadora había señalado como una “nestrorhumbertada” la decisión de penalizar la evasión tributaria a partir 5.000 millones de pesos, porque se convertía en una forma de evadir el delito. El exfiscal negó el señalamiento y con pruebas en mano la denunció.

3 de noviembre de 2022

Una disputa de marca mayor que llegó a los tribunales se acaba de abrir entre el exfiscal general de la nación Néstor Humberto Martínez y la senadora de la Alianza Verde Angélica Lozano. El asunto de fondo de esta pelea en la que Lozano terminará respondiendo ante la Corte Suprema de Justicia tiene que ver con la ya espinosa discusión de la reforma tributaria promovida por el gobierno del presidente Gustavo Petro.

En medio del debate, cuando se discutían los montos base para penalizar la evasión tributaria, la senadora Lozano pidió la palabra para señalar como responsable de una “trampa” ocurrida en el trámite de otra reforma de este tipo, en el año 2016, al exfiscal Martínez. Este hecho lo calificó, haciendo el símil de corrupto, como una “nerstorhumbertada”, para señalar el comportamiento de Martínez.

La explicación es que, según Lozano, fue el entonces fiscal quien en el trámite de esa reforma, en la que se incluía el tipo penal para la evasión tributaria, puso un monto base de 5.000 millones de pesos. Esto, en la práctica, se convertía en una especie de modo de evitar sanciones contra evasores por menos de ese monto; en la práctica, un “un mico”.

Señala la denuncia que “el sentido de dicha intervención no fue otro que el de sugerir que la acción del entonces fiscal general se orientaba a convertir en letra muerta el tipo penal, quién sabe con qué propósitos. Inclusive calificó mi presunta actuación como una ‘nestorhumbertada’.

Un asunto que, aunque delicado, en alguna medida le permite evitar problemas jurídicos por haberlo planteado en la plenaria donde el fuero congresional evita investigaciones por las posiciones expresadas en los debates.

Pero, en este caso, la senadora Lozano pasó sus argumentos a las redes. En Twitter manifestó que “En el 2016 se creó el delito de evasión de impuestos, pero... Hecha la ley, hecha la trampa: El Fiscal de la época NHM le agregó una cifra: Es delito evadir a partir de $5 mil millones Hoy no podemos corregir este saludo a la bandera, quitar ese piso y bajarlo a la realidad”.

Martínez no solo negó el señalamiento, advirtió que él “no solamente no le ‘agregó' esa cifra, sino que -expresamente y por escrito- la Fiscalía, por conducto de la vicefiscal de la época y del entonces fiscal general, le expresó al ministro de Hacienda Mauricio Cárdenas y al Congreso de la República, su desacuerdo con dicho monto, por razones de política criminal”.

Entrevista: el exfiscal Néstor Humberto Martínez se destapa en SEMANA | Semana Noticias

Pero el asunto con Martínez va a otro precio, no se quedó con la simple respuesta sino que presentó documentos para respaldar su actuación en 2016 y para argumentar la calumnia e injuria de Lozano. “Mediante oficio DFGN No. 03182 del 12 de diciembre de 2016, les manifesté a los presidentes de Senado y Cámara que la controvertida cuantía era ‘irrazonable’, ‘en tanto que el contribuyente cuyo comportamiento fraudulento recae sobre un monto inferior a los cinco mil millones de pesos ($ 5.000 millones), también lesiona los bienes jurídicos tutelados’.

“Y agregué: ‘Es decir, la omisión de activos o la declaración de pasivos inexistentes, cuando dichas conductas ascienden a tres mil o cuatro mil millones de pesos, no dejan de ser irrelevantes desde el punto de vista de su punibilidad’”.

Según la denuncia, ya en poder de la Corte Suprema de Justicia, es claro que la intención de la senadora Lozano era afectar el buen nombre del exfiscal Martínez al advertir que “los medios empleados en la divulgación de la información injuriosa y calumniosa, se dirigen objetiva y directamente a un inequívoco ánimo de afectar mi honra y buen nombre. El tono y el lenguaje empleados en las aseveraciones y la forma en que son exteriorizadas, no muestran nada distinto al propósito de injuriar y calumniar con pleno conocimiento e intención, aún a sabiendas de lo mendaz de sus dichos”.

Así las cosas, la espinosa reforma tributaria del gobierno Petro no solo tiene los ánimos crispados entre diferentes sectores de la sociedad, también se convirtió en una pelea política que no quedará ahí, irá a los tribunales donde tendrá que poner cara Lozano por lo dicho en la plenaria. El asunto no es para pasar por alto, pues de lo que se le acusa a la parlamentaria es de un delito.