El 12 de septiembre de 2022, en Barranquilla, Atlántico, un ataque armado dejó seis muertos y tres heridos. Los hechos fueron atribuidos a la organización criminal de Los Costeños, al mando de Jorge Eliécer Díaz Collazos, alias Castor, quien ahora se postula como gestor de paz ante el Gobierno del presidente Gustavo Petro.
El responsable de los disparos, un sicario al servicio de alias Castor, fue Luis Miguel Muñoz. La Fiscalía logró demostrar ante un juez la responsabilidad de este integrante de Los Costeños en la masacre y solicitó su condena, pese a que durante el proceso se declaró inocente. La pena impuesta por el juez fue de 60 años de prisión.

“Por todo lo anterior, Muñoz Pérez fue declarado responsable de los delitos de homicidio, homicidio en grado de tentativa y fabricación, tráfico, porte o tenencia de armas de fuego, accesorios, partes o municiones, todas las conductas agravadas. La máxima pena impuesta en su contra deberá cumplirla privado de la libertad en un centro carcelario”, señaló la Fiscalía.
Lo que advierten los investigadores es que Luis Miguel Muñoz llegó al barrio Las Flores, en la ciudad de Barranquilla, y de manera indiscriminada disparó contra un grupo de personas que se encontraban en un establecimiento comercial. El ataque, aparentemente relacionado con una retaliación entre grupos criminales, se convirtió en una aterradora masacre.
“En el curso de la investigación orientada por una fiscal de la Dirección de Apoyo Territorial se estableció que el hoy sentenciado, en compañía de otros hombres armados, descendió de una camioneta y disparó indiscriminadamente contra un grupo de personas que departía frente a un establecimiento de comercio del barrio Las Flores”, dijo el ente acusador.

En el expediente reposan todos los elementos de prueba recaudados por la Fiscalía a lo largo de la investigación, los cuales advierten que la masacre se habría perpetrado por orden de alias Castor, cabecilla de la organización criminal de Los Costeños en el norte del país, y que con ella se lanzó una amenaza a la comunidad.
“La acción violenta habría sido ordenada por el máximo cabecilla de Los Costeños, Jorge Eliécer Díaz Collazos, alias Castor, como parte de una disputa violenta con otras estructuras criminales por el control de las rentas ilícitas en varios sectores de la ciudad”, explicó el ente acusador al confirmar la condena.

Se trata de una condena contundente que, para un hombre de la edad de Luis Miguel Muñoz, prácticamente se convierte en una pena de prisión de por vida, pues, con apenas 30 años y una sentencia de 60 años por el delito de homicidio agravado, queda, en la práctica, con un cupo de por vida en la cárcel.










