La Policía Nacional, con apoyo de las Fuerzas Miliares y la Fiscalía, informó la liberación segura de 71 personas tras la irrupción de un grupo armado en la noche del 12 de diciembre, en la mina de Esmeraldas Santa Rosa. Cuatro de los capturados son empleados de la misma empresa.
Un grupo armado ingresó de manera irregular a la bocamina “cunas”, concesión de la empresa Esmeraldas Santa Rosa, en el municipio de Maripí, Boyacá. Según las autoridades, en el episodio fueron retenidas 71 personas: 63 trabajadores y 8 vigilantes de seguridad privada.

Las autoridades consignaron que la entrada se produjo alrededor de las 5:40 p.m. y que los agresores —aproximadamente 34 hombres, vestidos de negro y con el rostro cubierto— permanecieron en el interior durante varias horas.
Entre las 7:00 p.m. y las 9:00 p.m. permitieron la salida de dos personas, lo que alertó a las autoridades y activó el despliegue institucional.
En la madrugada del sábado 13 de diciembre, hacia las 3:20 a.m., la operación coordinada entre Policía Nacional y Fuerzas Militares culminó con la liberación de la totalidad de los retenidos. Las autoridades indicaron que los trabajadores fueron puestos a salvo y no se reportaron afectaciones a su integridad física.

Durante el incidente se dañó el sistema de videovigilancia de la mina: las autoridades señalan que la fibra óptima fue cortada de manera internacional, lo que afectó las cámaras y la capacidad de monitoreo del lugar.
Además, los agresores habrían hurtado tres revólveres y dos escopetas tipo Mossberg que estaban en dotación del personal de seguridad privada.
En el operativo se lograron ocho capturas. De acuerdo con la Policía, cuatro de las personas detenidas son trabajadores de Esmeraldas Santa Rosa. En el sitio también se incautaron siete armas de fuego (un revólver y seis pistolas), munición, radios de comunicación y herramientas como barras de indugel y taladros, elementos que las autoridades relacionan con la acción criminal.

La respuesta institucional incluyó unidades especializadas: Seccional de Investigación Criminal (SIJIN), seccional de Inteligencia Policial (SIPOL), Seccional de Carabineros (SECAL), Grupo Antisecuestro y Antiextorsión (GAULA) y el Grupo de Operaciones Especiales (GOES).
También se activó un Puesto de Mando Unificado (PMU) en Chiquinquirá y el Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) de la Fiscalía está apoyando las pesquisas.
El brigadier general William Rincón Zambrano, director general de la Policía Nacional, aseguró que desde el primer momento se activaron capacidades operativas e investigativas para “proteger la vida y la integridad de los trabajadores, garantizar su liberación segura y avanzar con contundencia en la identificación y captura de los responsables”.
La entidad agregó que, hasta ahora, no se ha establecido un vínculo directo con grupos armados organizados ilegales y que esa hipótesis está en verificación.










