MinHacienda, Ricardo Bonilla, arrancó su defensa para tumbar el “conclave” donde se pactó la corrupción en la UNGRD

Aunque aún no ha sido notificado formalmente de su vinculación al escándalo de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo - UNGRD, el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, arrancó su defensa en el proceso que avanza en la Fiscalía.

Ante un magistrado del Tribunal de Bogotá, el ministro Bonilla y su defensa solicitaron incluir un listado de pruebas que ayuden a desbaratar las declaraciones de los principales testigos en este escándalo: Olmedo López y Sneyder Pinilla.

El objetivo de Bonilla es tumbar la hipótesis que advierte un supuesto cónclave entre ministros y directores de entidades para acordar cómo se repartirían los contratos de la UNGRD y donde el Ministro, según las declaraciones, ocupó la silla del centro.

En la audiencia del Tribunal de Bogotá, el pasado 2 de agosto y donde participó la Fiscalía, el ministro solicitó acceder a una serie de documentos y actas que son reservadas, pero que resultan necesarias, para su defensa, en el propósito de demostrar que no hubo reuniones secretas, sino la agenda ministerial.

Para la Fiscalía no hubo duda, Ricardo Bonilla, como ministro de hacienda, se reunió con Olmedo López, entonces director de la UNGRD y coordinaron cómo sería la entrega de contratos que salían de la entidad y quiénes serían los contratistas. En las audiencias de imputación de cargos la revelación de la Fiscalía fue contundente.

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