MinJusticia desata polémica: respalda nuevas oportunidades a delincuentes que traicionen procesos de paz, como el caso de Iván Márquez

La ministra de Justicia, Ángela María Buitrago, desató una gran polémica al hablar de las segundas y hasta terceras oportunidades que se les debe dar a temidos delincuentes que abandonen procesos, como es el caso de alias Iván Márquez, cabecilla de la Segunda Marquetalia de las disidencias de las Farc, uno de los principales desertores del proceso de paz.

En medio de un evento sobre los 20 años de la implementación de Ley de Justicia y Paz, que se llevó a cabo en la ciudad de Bogotá, la funcionaria recordó que más allá de que una persona sea expulsada o abandone un proceso, no quiere decir que no se pueda volver a sentar para negociar.

No obstante, dejó en claro que los marcos jurídicos serán totalmente diferentes a los que se establecieron en un primer momento. “Van a tener que ser nuevos marcos dentro de la realización de nuevos hechos que podrán ser verificados como delictivos”, señaló.

“El marco constitucional desde 2016 aprobó una necesidad de dialogar con las personas, de sentarse en la mesa y de encontrar medios para buscar la paz”, manifestó.

Sin embargo, Buitrago remarcó que cuando se “defraudan esas expectativas de paz”, el proceso debe ser reconducido y, para argumentar su idea, puso de ejemplo lo que ha hecho el propio presidente Gustavo Petro en el caso del Ejército de Liberación Nacional (ELN).

“Esto nos lleva a nosotros a decir cuál es la justicia que debe aplicarse en el contexto del sometimiento o de la desmovilización de grupos actuales”, explicó.

Es en este punto, según dijo, donde inicia la discusión teórica y práctica desde diferentes contextos y sectores. “Desde los jueces, desde los magistrados, desde la sociedad, desde el Legislativo, desde el Ejecutivo, que permita llegar a un acuerdo sobre cuál es el marco adecuado”, concluyó.

Sobre este tema, el caso de Iván Márquez es quizás el más sonado y recordado del último tiempo. El guerrillero firmó el acuerdo de paz en el año 2016 con el entonces gobierno de Juan Manuel Santos.

De hecho, Márquez fue una de las cabezas del equipo que negoció en La Habana, Cuba, y con él se pactaron todos los puntos. Sin embargo, poco después de la firma desapareció y, tras varios días, se supo que había vuelto a las armas.

En ese momento se declaró como uno de los comandantes de la Segunda Marquetalia de las disidencias de las Farc, por lo que las autoridades han seguido su rastro y se presume que está en Venezuela. No obstante, también han corrido rumores sobre su posible muerte, pero esto no ha sido confirmado.