Nación
“Mirémonos de cerca”: la campaña contra la estigmatización de los firmantes de la paz
Quienes dejaron las armas y hoy la apuestan a la vida civil cuentan sus historias en un esfuerzo para luchar contra los estereotipos.

Casi diez años después de firmarse la paz con las Farc, los colombianos siguen viendo con recelo a quienes alguna vez hicieron parte de esas filas. Una campaña de la Agencia Nacional para la Reincorporación y la Normalización, apoyada por la Misión de Verificación de las Naciones Unidas y el PNUD, busca poner en evidencia cómo la estigmatización afecta de manera muy grave la vida de quienes decidieron dejar las armas.
“Es muy importante avanzar en esta conversación de país, interpelarnos y analizar cómo podemos derribar estas narrativas, pues la estigmatización es la puerta de entrada a todo tipo de violencias, tanto físicas como simbólicas, contra las y los firmantes. Además, mata la reconciliación, la democracia y la paz; invisibiliza los logros de la reincorporación y niega la posibilidad de construir una convivencia basada en el reconocimiento mutuo y el respeto”, aseguró Alejandra Miller, directora de la ARN en la presentación de la iniciativa a los medios de comunicación.
Cada puerta que se cierra es una vida que se pone en riesgo. ❤️🩹
— PNUD Colombia (@PnudColombia) May 15, 2025
Las personas que dejaron las armas no son amenazas: son fuerza, son emprendimiento, son futuro. 🫂
La estigmatización mata los sueños; la confianza los hace realidad.#MirémonosDeCerca @ARNColombia @MisionONUCol pic.twitter.com/IsBxSYjRKU
La representante del PNUD en Colombia, Sara Ferrer, aseguró que hay “prejuicios que están anclados en la sociedad tras décadas de conflicto y la voluntad aquí es que nos miremos cada uno de nosotros como seres humanos que somos, que compartimos este planeta, pero también que miremos a nuestras familias, a nuestras comunidades y, por supuesto, al rol que cada uno tiene en la construcción de paz”.
La alta funcionaria de la ONU dijo que esta estigmatización política, social, económica y comunitaria “es la que intentamos de alguna manera combatir porque está pasando y está afectando a muchos, aunque los firmantes de paz siguen comprometidos con la paz. Más de un 80 % siguen firmes con el proceso".
Lo más leído
“La estigmatización es una forma de violencia”: Carlos Ruiz Massieu, Jefe de la Misión de Verificación de la ONU en Colombia, habla sobre campaña
— Revista Semana (@RevistaSemana) May 13, 2025
contra la estigmatización de los firmantes de paz. https://t.co/if1kX8q65f pic.twitter.com/X6SB1SYFTe
“La estigmatización es una forma de violencia y es quizás una de las peores formas, porque lo que hace es generar más violencia”, aseguró Carlos Ruiz Massieu, jefe de la Misión de Verificación de la ONU en Colombia.

Para él, estas campañas son muy importantes en estos momentos. “Al promover una campaña así no desconocemos el pasado. El pasado es muy importante. Pero es importante centrarnos en lo que los firmantes de paz han logrado estos ocho años... Hoy decimos ‘no’ a la estigmatización y ‘sí’ a la reconciliación”, resaltó.
La campaña incluye varias piezas en video en las que los excombatientes cuentan sus historias. Por ejemplo, hablan Mariana y Juan Felipe Lombana, hija de un excombatiente, que tienen hoy una tienda de café en Melgar. “Toda la vida fuimos criados en el café. Vemos el café hoy como paz”, cuenta él.

“Si bien tuvimos el valor de empuñar las armas, también tuvimos el valor de dejarlas”, cuenta William Saboya Zambrano, otro de los firmantes que habla en uno de estos cortos.

“La estigmatización le resta mucho a la construcción de paz. Neutraliza muchas iniciativas y quehaceres. Somos una sociedad que nos cuesta aceptar las diferencias. He sido objeto de estigmatización. Es uno de los hechos que hay que superar. La historia de este país no puede ser la de la guerra indefinida”, cuenta Benedicto González, otro de los firmantes que hoy vive en La Guajira.
En el contexto de la campaña se han dado a conocer los resultados del estudio Escuchar la Paz: entre contrastes y anhelos de paz y desarrollo humano. En el estudio se cuenta cómo, por ejemplo, solo una de cada cuatro personas se sentiría cómoda teniendo como vecina a una persona firmante. También que en las zonas PDET (Programas de Desarrollo con Enfoque Territorial), solo 5,1 % confía en los firmantes, mientras que en las zonas urbanas la cifra sube, pero solo alcanza al 11 %. Por otro lado, el 49 % de las personas que contestaron ese cuestionario, aseguraron que los firmantes se “aprovechan” de los programas del Estado.

Mientras tanto, la situación de seguridad que viven los excombatientes es crítica. Según cifras recogidas por Naciones Unidas, desde la firma del Acuerdo de Paz, 460 excombatientes han sido asesinados, de ellos 11 eran mujeres, 59 indígenas y 57 afrocolombianos. Para el periodo del 27 de diciembre de 2024 al 26 marzo 2025, 19 excombatientes fueron asesinados, configurando un incremento significativo comparado con el periodo anterior.