Nación
Nueva asonada en El Tambo, Cauca deja cuatro soldados secuestrados; Ejército se pronunció
Un nuevo hecho de violencia se registró en el departamento.

Este sábado 21 de junio, la Tercera División del Ejército reportó que las tropas de la Fuerza de Despliegue Rápido n.º 4 de dicha división fueron víctimas de una asonada en el departamento del Cauca, más exactamente en el municipio de El Tambo.
De acuerdo con el informe preliminar de las autoridades, durante el desarrollo de las operaciones militares fueron secuestrados cuatro uniformados, entre los que se encontraban el comandante de la unidad y tres soldados profesionales.

El resto de la tropa permaneció a las afueras del centro poblado, pero se encontraban rodeados de 200 habitantes del sector.
“Mantenemos nuestro despliegue en la zona y avanzamos en acciones concretas para restablecer el orden, proteger a la comunidad y garantizar el cumplimiento de su misión constitucional. Exhortamos al respeto de las instituciones y ratificamos nuestro compromiso de velar por la seguridad de las comunidades”, comentó la división.
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De acuerdo con la información entregada, los hechos habrían sido producto de la instrumentalización ejercida por el grupo armado organizado residual Carlos Patiño a las comunidades.
El brigadier general Federico Alberto Mejía Torres, comandante de la Tercera División del Ejército, indicó que mientras desarrollaban una operación que dio con la captura de un presunto integrante de la estructura Carlos Patiño, esta logró instrumentalizar a la población. Lograron recuperar al capturado y generaron un asedio contra los uniformados.

“Las operaciones continúan desarrollándose con más fuerza que nunca, no vamos a parar. Una asonada no será mérito para parar la fortaleza de nuestros hombres, por el contrario nos genera mayor compromiso y reto contra estas estructuras, que tendrán que abandonar, vivos o muertos, el cañón del Micay”, dijo el uniformado.
Finalmente, este hizo una invitación a los miembros de las estructuras para que se entreguen, recapaciten y puedan vivir en paz con una familia que los espera, pues de lo contrario, deberán someterse a las operaciones militares con las armas que la República tiene dispuestas para defender la democracia de los colombianos.
