Pacientes recuperados se están quedando con cilindros de oxígeno para atención de covid-19

Aunque la alcaldesa de Bogotá, Claudia López, reportó este domingo que la capacidad de camas UCI para atender a pacientes con covid-19 bajó en un 83,3 por ciento, la emergencia está lejos de ser superada. La Andi insistió en la necesidad de que pacientes que hayan solicitado tanques de oxígeno para atención en sus viviendas y que ya no los estén utilizando, los devuelvan porque estos serán clave para atender a otros pacientes en medio de una pandemia que, pese a la reducción de las cifras, no desaparecerá pronto.

Ingrid Marcela Reyes, directora de la Cámara de Gases Industriales y Medicinales de la Andi, informó que el incremento de contagios por covid-19, que ya pasó los dos millones, obligó a centenares de colombianos a utilizar estos equipos de oxigenación en sus viviendas. “El pico que hubo entre diciembre y enero hizo que se demandaran casi en su totalidad los cilindros”, expresó. La necesidad de estos aparatos los convirtió en escasos y de difícil consecución, añadió.

La situación, según Reyes, puede preocupar porque los contenedores de oxígeno que los colombianos utilizaron en sus hogares, mientras pasaban los efectos más difíciles del virus, no se fabrican en este país. Todos llegan importados desde Asia y Estados Unidos, donde la pandemia aún no desaparece y se agudiza mucho más con la llegada de la sepa inglesa que, según expertos, genera un mayor número de contagios.

Por esto, los tiempos de importación se han duplicado y los más afectados podrían ser las nuevas víctimas del coronavirus que podrían enfrentarse a una escasez de los tanques.

Por esta dramática realidad es que resulta importante –según la Andi– que quien no utilice los tanques los regrese a las EPS o IPS y que puedan servir para salvar más vidas ya que actualmente, ante la alta ocupación de unidades UCI en clínicas y hospitales, estos tanques de oxígeno permiten atender pacientes en unidades de urgencia u observación, además de las viviendas, es decir, se convirtieron en una alternativa para contrarrestar el alto flujo de ocupación de unidades de cuidados intensivos.

“Si no están los cilindros disponibles y los concentradores (generan oxígeno a través de energía eléctrica), los pacientes no podrán salir de los centros asistenciales y se congestionarán los hospitales”, explicó Reyes, quien insistió en la necesidad de descongestionar las Ucis.

De acuerdo a lo encontrado por la Andi, hay muchas víctimas del covid-19 que solicitaron tanques y ya están en óptimas condiciones de salud. Sin embargo, no los regresan porque no les cobran los días de uso, temen que el virus los sorprenda de nuevo, como está demostrado y estiman que alguno de sus parientes resulte contagiado y lo requiera, pero están generando un problema mayor.