Padre de abogado asesinado en el sur de Bogotá rechaza liberación de su presunto homicida

El sábado 11 de enero, en un atentado sicarial, el abogado Harold Hurtado fue asesinado en la localidad de Tunjuelito, en el sur de Bogotá.

El padre de la víctima relató a SEMANA que su hijo recibió siete impactos de bala cuando iba hacia su vehículo tras llevar a unos familiares al hospital de El Tunal.

El presunto sicario fue capturado por unos agentes que iban en patrulla y pasaban en ese momento por el lugar, sin embargo, fue dejado en libertad por una juez de garantías de la capital del país mientras continúa el proceso penal.

El hecho fue cuestionado por el presidente Gustavo Petro, quien trinó sobre el caso en su cuenta de la red social X.

“El abogado Harold Hurtado, militante de mi campaña presidencial, fue asesinado en Bosa. El asesino fue capturado en flagrancia, pero una juez lo dejó en libertad. ¿Por qué?”, escribió el mandatario en la noche del pasado martes 14 de enero.

El padre del abogado también manifestó su inconformidad por la decisión de la juez de garantías. “Me siento inconforme. En el momento que estaba ocurriendo el hecho, llega una patrulla de la Policía, ve al sujeto en flagrancia y dispara. El sujeto sale corriendo. El conductor de la patrulla se le pega atrás, lo alcanza (...). Lo cogieron a unos metros del lugar de los hechos y lo capturaron con el arma homicida”, dijo a este medio.

El hombre afirmó que, tras ser capturado, el presunto sicario fue puesto a disposición de la Fiscalía y los agentes dieron sus testimonios sobre cómo se realizó el procedimiento para detenerlo. Sin embargo, consideró que la juez del caso “no valoró las pruebas” y “se basó más en supuestos y no en los hechos”.

“Al que se capturó en flagrancia se le respetaron sus derechos, pero a mi hijo no se le respetaron sus derechos. A él lo privaron del derecho más grande que se puede tener, que es la vida. Privaron a su esposa de él, era una familia muy feliz. Era un hombre trabajador que tenía sueños”, agregó.

El padre, además, señaló que su hijo nunca recibió amenazas de muerte o intimidaciones. “En ningún momento fue amenazado. Él era un abogado, una profesión de riesgo, pero no llevaba procesos penales. Se dedicaba más a lo laboral o lo administrativo. Era una persona de bien”, expresó.

“Lo que pido es que se haga justicia, que quien hizo esto lo pague”, sostuvo.