Plenaria de la Cámara volverá a sesionar presencialmente

Una de las consecuencias del coronavirus en nuestro país ha sido la imposibilidad de que el Congreso sesione normalmente por cuenta de la pandemia y por esa razón las sesiones se han hecho de manera remota, generando amplios debates sobre la efectividad de este mecanismo.

Cuando se han reunido de manera presencial para algunas discusiones políticas, algunos congresistas anuncian días después que son portadores del virus y ello obliga a que nuevamente se cancelen las sesiones mixtas. No obstante, como el país ya está en medio de su reactivación, con bastantes medidas de bioseguridad, el presidente de la Cámara Germán Blanco anunció que la próxima semana la plenaria se convocará de manera presencial para discutir tres actos legislativos.

Así las cosas la plenaria se citará presencialmente para el martes, miércoles y jueves de la próxima semana con la finalidad de votar las iniciativas de reforma política, el de semillas transgénicas y la regulación del consumo de cannabis recreativo.

“Estamos haciendo uso del fallo de la Corte Constitucional, lo que quiere decir que tratándose de un acto legislativo no queremos viciar su procedimiento (...) nosotros lo que queremos es hacer bien las cosas, conforme lo ordenan también las autoridades judiciales”, agregó.

Agregó que a pesar de que la citación será presencial se deben adelantar los protocolos de bioseguridad y hacer una distribución de los espacios ya que no se podrán reunir todos los representantes en un mismo espacio.

“Vamos a garantizar todos los protocolos de bioseguridad para los parlamentarios que asistan. Lo primero es que los que estén exceptuados por los decretos de salud pública nacional, pues no van a venir, pero van a poder intervenir y votar, a través de la virtualidad. Lo segundo es que los que asistan, que prevemos va a ser dos terceras partes de la Cámara, esas 120 personas van a estar divididas en distintos salones, manteniendo la distancia social y los protocolos de bioseguridad, votarán e intervendrán de manera directa en el salón elíptico, no a través de una plataforma, sino con el sistema biométrico que existe en el salón elíptico”, dijo Blanco.

Según el presidente de la Cámara este ejercicio servirá para ir retomando la normalidad en la corporación aunque eso dependerá de cómo avancen las sesiones y las pruebas de coronavirus que se vayan practicando a los asistentes a las sesiones.

El vicepresidente del Partido Conservador, Wadith Manzur, aseguró que la decisión de citar presencialmente es necesaria aunque contó que la mesa directiva deberá definir este fin de semana cuáles serán los mecanismos para la discusión y votación de los proyectos ya que no todos estarán en un mismo recinto.

“En cumplimiento de la sentencia de la Corte Constitucional para dar trámite a los actos legislativos es indispensable que se convoque de manera presencial al Congreso de la República, así lo solicitó la Corte y le estaremos dando cumplimiento(…) no podemos detener la agenda legislativa del país sobre todo en temas tan importantes como lo son las modificaciones a la Constitución y a nuestra carta magna”, dijo Manzur.

El presidente de la Comisión Primera de la Cámara, Alfredo Deluque, explicó que los tres proyectos que se discutirán pasaron por esa célula legislativa y que para ello se hicieron sesiones presenciales, por lo que está de acuerdo en que se continúe legislando de la misma manera.

“Venimos desde septiembre convocando presencialmente precisamente atendiendo las sugerencias y las recomendaciones hechas por la Corte Constitucional de qué los actos legislativos necesitan un trámite tan especial que su discusión debe hacerse de manera presencial. Así que me parece muy importante y en sintonía con lo que venimos haciendo que el presidente Germán Blanco haya decidido ponerlos en el orden del día y debatirlos de manera presencial con el fin de qué ahí podamos nosotros tomar las decisiones necesarias y además hacer el debate en la misma medida en que lo hemos venido haciendo”.

Los legisladores coinciden en que las sesiones presenciales servirán para evitar que el trámite de las iniciativas tengan algún vicio y evitar demandas futuras que podrían tumbar la aprobación de las mismas.