Risas y muecas. Así fue la actitud de Juan David Beltrán, el joven señalado de asesinar al director de la cárcel La Modelo

Mientras el juez 13 de control de garantías de Bogotá resolvía si lo enviaba o no a la cárcel, Juan David Beltrán —el joven señalado por la Fiscalía General de ser el sicario que le disparó al director de la cárcel La Modelo de Bogotá, coronel en retiro Élmer Fernández Velasco— estaba con una actitud totalmente distraída y desafiante.

En varios momentos de la audiencia, que se celebró a las 6:30 de la mañana de este miércoles, 22 de enero, Beltrán estuvo haciéndose bromas con sus custodios, rascándose la cabeza, mirando la entrada y salida de los policías del calabozo en el que se encontraba, en lugar de atento a lo que realmente estaba diciendo el juez.

Las cámaras registraron varias veces una actitud desafiante. En otras, se veía que estaba a punto de quedarse dormido y por momentos se le veía echando chistes y hablando con la mano sobre su boca con los custodios que permanecían a su lado.

Esta situación llevó a que el juez de control de garantías hiciera varias pausas para que el procesado atendiera el asunto de la audiencia judicial.

Tras una hora y diez minutos de audiencia, el juez avaló la petición presentada por la Fiscalía General para enviar a la cárcel al joven, quien fue capturado el pasado lunes en Barrancabermeja, Santander.

Para el juez, la pena a la que se enfrenta el procesado (entre 50 y 60 años de prisión), la gravedad de los delitos (homicidio agravado y porte ilegal de armas) y el hecho que no tiene arraigo, llevan a inferir que existe un riesgo de fuga claro.

Igualmente, con el fin de proteger a la sociedad, la medida privativa de la libertad en centro carcelario se hace necesaria.

En la imputación de cargos, la delegada de la Fiscalía General indicó que la evidencia técnica y documental llevó a establecer la identidad de Juan David Beltrán como la persona que le disparó en una oportunidad al director de la cárcel La Modelo, quien se movilizaba en su vehículo particular junto a un agente del Inpec.

Tras una minuciosa reconstrucción de los videos de las cámaras de seguridad, se pudo establecer que Beltrán era el copiloto de una motocicleta negra que siguió el vehículo del coronel durante varias cuadras, en la tarde del 16 de mayo de 2024.

En la carrera 29C con 79B, aprovechando que el vehículo bajó la velocidad por unas obras en la vía, el sicario se acercó al carro color gris claro y le propinó un disparo al coronel, quien falleció inmediatamente. Pocos segundos después, llegó otra motocicleta para revisar la situación.

Las cámaras de seguridad del sector y de establecimientos comerciales registraron la ruta de escape de los sospechosos. Los sicarios utilizaron la carrera 30 sentido sur-norte hasta llegar a la calle 87. Ahí se dividieron.

La motocicleta que transportaba a Beltrán bajó por la carrera 24 dirección sur-norte. En la carrera 24 con calle 73, las cámaras de seguridad de la sede de la Cruz Roja registraron el momento exacto en el que el sicario se bajó de la moto.

Pocos minutos después, cruzó las dos avenidas a paso lento, se peinó varias veces y sacó el celular para hacer una llamada.

Gracias a que se acercó considerablemente hasta el punto en el que se encontraba la cámara, se pudo realizar una individualización clara de su rostro.

Los investigadores identificaron a esta persona como Juan David Beltrán Torres, quien viajó de Barrancabermeja a Bogotá en mayo de 2024 con el fin de ejecutar el crimen junto a otras tres personas, las que ya están en la cárcel y a la espera del inicio del juicio en su contra.

La hipótesis de la Fiscalía apunta a que el crimen del director de la cárcel La Modelo se concertó después de que se negara a firmar las órdenes de traslado de un grupo de integrantes de bandas criminales y delincuenciales.