Meta
Una persona muerta y varios desaparecidos tras creciente de río en Meta: las víctimas estaban realizando rafting
Los afectados estaban en cuatro balsas y un kayak. Continúa la búsqueda de desaparecidos.

Una grave emergencia se registró este viernes en aguas del río Güejar, uno de los más caudalosos del departamento del Meta, luego de que cuatro balsas y un kayak naufragaran con 29 personas a bordo en jurisdicción del municipio de San Juan de Arama.
Según información preliminar suministrada por los organismos de socorro, hasta el momento se han rescatado con vida a 22 personas, se ha recuperado un cuerpo sin vida, y se mantiene la búsqueda de al menos una mujer reportada como desaparecida.
Las labores de rescate se concentran en la ribera del río, en una operación liderada por el Consejo Municipal de Gestión del Riesgo, con apoyo de los cuerpos de bomberos de Granada, Fuente de Oro, Vista Hermosa y San Juan de Arama.
La Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD) confirmó que hace seguimiento a la creciente súbita del río ocurrida este mismo 6 de junio en el municipio de Mesetas, que habría provocado el siniestro fluvial. La entidad también coordina apoyo aéreo con la Fuerza Aérea Colombiana para reforzar las operaciones de búsqueda y rescate en la zona.
La gobernadora del Meta, Rafaela Cortez, se pronunció frente a la tragedia: “Cuerpos de socorro, unidades de la Policía del Meta, el Ejército Nacional, la Defensa Civil, Bomberos y funcionarios de la Dirección de Gestión del Riesgo y Desastres de la Gobernación del Meta acuden a esta hora a atender la emergencia que se presenta en nuestro departamento por cuenta de una creciente del río Güejar. Todos los recursos a nuestra disposición rodean a este grupo de personas a quienes la naturaleza castiga de manera inclemente. Mis más sentido pésame para las familias y amigos de quienes hoy han perdido la vida, así como mi compromiso con las operaciones de rescate que se adelantan”.
La emergencia continúa siendo atendida con una activa coordinación interinstitucional, mientras se evalúan las causas del incidente y se establece el número definitivo de afectados.
El rafting está dentro de la categoría de deportes extremos acuáticos y consiste en mantener el control de una balsa neumática y su motor que, en este sentido se convierte en el vehículo para movilizarse, mientras se permanece dentro de un río con aguas bravas que golpean con fuerza la lancha.
Sin embargo, la idea no es únicamente luchar contra la corriente de las aguas, sino tomar impulso con los remos para alcanzar una velocidad elevada y, poco a poco, aumentar su nivel de dificultad.