Bogotá
Denuncian acoso laboral, falta de personal y hasta posible detrimento patrimonial en el Instituto de Protección Animal en Bogotá
Las denuncias de lo que está sucediendo al interior del instituto fueron expuestas por la concejal Clara Lucía Sandoval.
La concejal Clara Lucía Sandoval, del Partido Liberal, expuso nuevas denuncias adicionales a las que ya había presentado meses atrás, revelando la crítica situación en la que estaría el Instituto Distrital de Protección y Bienestar Animal (IDPYBA).
Las nuevas denuncias, enviadas al correo electrónico de la cabildante señalan problemas graves en el manejo del IDPYBA: programas operando a media marcha, acoso laboral, falta de personal, entre otros. En respuesta, la concejal Sandoval ha presentado una proposición de control político para hacer frente a estas denuncias y esclarecer lo que está sucediendo.
Una de las denuncias más preocupantes apunta a la gestión de la Subdirección de Atención a la Fauna, liderada por Óscar Jiménez. La cabildante expuso que el funcionario estaría enfrentando procesos en la Personería de Bogotá por presunto tráfico de influencias, acoso laboral y participación en política.
Según las denuncias, el programa de esterilizaciones no funciona desde hace más de tres meses debido a la ausencia de una licitación vigente. Además, de acuerdo con Sandoval, el punto fijo de esterilizaciones en la Unidad de Cuidado Animal tampoco está en operación. Las denuncias en mano de la concejal señalan que Óscar Jiménez no renovó los contratos del cirujano y del anestesiólogo por diferencias personales, sumadas a la falta recurrente de insumos.
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Por otro lado, las denuncias también señalan que más del 70 % de los contratos de personal han finalizado entre junio y julio, dejando los programas a media marcha y a la Unidad de Cuidado Animal con un personal reducido, lo que incrementa la carga laboral generando estrés y fatiga.
Así mismo, la concejal del Partido Liberal indicó que el laboratorio interno no funciona, obligando al IDPYBA a recurrir a servicios externos para análisis de muestras, generando posibles sobrecostos y posible detrimento patrimonial. El área de necropsias tampoco está funcionando debido a la falta de personal.
Las denuncias también revelan que uno de los programas pilares como el Escuadrón Anticrueldad solo cuenta con dos médicos veterinarios contratados, y el programa de Urgencias Veterinarias tiene únicamente un veterinario para atender las 20 localidades de Bogotá. Mientras tanto, se contratan asesores con salarios mensuales de 10 millones de pesos, muy superiores a los que recibe un veterinario, y, además, a los contratistas no se les ha pagado.
La concejal Sandoval hizo un llamado urgente a la administración distrital para que tome en serio la política de protección animal. El IDPYBA ya estaba en cuidados intensivos desde la alcaldía de Claudia López y lo que esperábamos de la nueva administración es que recupere el rumbo y garantice la protección y el bienestar de los animales.