Esta era la temida estructura dedicada a la trata de personas, que operaba desde un bar de Chapinero y donde abusaban de sus víctimas

Tras 12 meses de investigación, y gracias a la denuncia de una de las víctimas y al trabajo en territorio de la Secretaría Distrital de Seguridad, se logró desarticular un grupo delincuencial común organizado dedicado a la trata de personas que operaba desde un bar en el sector de Lourdes, en Chapinero.

Desde la Secretaría de Seguridad, junto a Migración Colombia, se realizaron diferentes controles que permitieron identificar a los actores criminales y a posibles víctimas.

Mediante labores investigativas como entrevistas, labores de vigilancia y seguimiento, verificación de establecimientos, reconocimientos en álbum fotográfico, inspecciones judiciales, reconstrucción en el lugar de los hechos por parte de las víctimas y solicitud de análisis, se logró materializar en una diligencia de registro y allanamiento, se logró la captura mediante orden judicial de las tres personas.

Se le acusa de los delitos de trata de personas con fines de explotación sexual, secuestro agravado y acceso carnal violento.

Este grupo delincuencial se dedicaba a “captar, trasladar, acoger y/o recibir menores entre los 15 y 16 años de edad, en su mayoría de nacionalidad extranjera”, a las que retenían en un establecimiento de comercio, que funcionaba como bar, pero que en realidad era un sitio para el entretenimiento de adultos.

Estas menores eran retenidas por días, hasta que falsificaban sus documentos de identidad y con esto evadían los controles de las autoridades ante posibles planes o intervenciones en este lugar.

Estas mujeres eran sometidas a abusos sexuales en cuartos oscuros por parte del líder de esta estructura delincuencial y, posteriormente, sometidas a encuentros sexuales con los clientes que frecuentaban este sitio, como extranjeros, universitarios y comerciantes de la localidad de Chapinero del sector de Lourdes.

De acuerdo con las investigaciones, se pudo establecer que esta organización criminal cobraba diariamente, por cada servicio, entre 150.000 y 200.000 pesos. De igual manera, cada menor podría ser abusada hasta seis veces el mismo día y, una vez que terminaban su turno, eran trasladadas a ‘paga-diarios’ del sector, con el fin de tenerlas controladas todo el tiempo.

Entre los capturados se encuentran alias Mauricio, jefe de esta estructura; era quien trasladaba y acogía a las menores en este establecimiento, para posteriormente abusarlas y ofrecerlas a sus clientes; alias Sergio, administrador de este lugar, encargado de tramitar los documentos falsos para que estas menores ejercieran la prostitución; por último, alias Ruby se encargaba de atraer a las menores para posteriormente llevarlas al jefe, para abusarlas y que ejercieran esta actividad sexual.

A dos de estos capturados les registran anotaciones en el Sistema Penal Oral Acusatorio por los delitos de inducción a la prostitución, violencia intrafamiliar, inasistencia alimentaria, porte y tráfico de estupefacientes y porte ilegal de armas de fuego. Los capturados, de 41, 44 y 50 años de edad, fueron dejados a disposición de la Fiscalía General de la Nación, donde un juez de control de garantías les dictó medida de aseguramiento en centro penitenciario y carcelario.