Bogotá

Intensifican controles por ruido ambiental en Bogotá: van más de $105 millones en multas

Antonio Nariño, Usme, Puente Aranda, Engativá y Kennedy son las localidades con mayor índice de ruido.

Redacción Semana
19 de diciembre de 2024
La Secretaría Distrital de Ambiente intensificó los controles contra el ruido en Bogotá
La Secretaría Distrital de Ambiente intensificó los controles contra el ruido en Bogotá | Foto: Secretaría de Ambiente

Las autoridades están intensificando los controles a establecimientos comerciales e industriales por exceder los límites de ruido permitidos, en cumplimiento de la normativa ambiental vigente.

De acuerdo con la Secretaría Distrital de Ambiente, en 2024 se han sancionado establecimientos por violar los límites de ruido permitido con multas que sumaron los $ 105.079.014.

“Estas acciones destacan el compromiso de la administración distrital por combatir uno de los problemas ambientales más sensibles para la ciudadanía: la contaminación auditiva”, aseguró la secretaria de Ambiente, Adriana Soto.

Secretaria de Ambiente, Adriana Soto.
Secretaria de Ambiente, Adriana Soto. | Foto: Alcaldía de Bogotá

El ruido, especialmente el generado por actividades económicas, figura entre las principales quejas presentadas por la ciudadanía en Bogotá. En respuesta, la Secretaría de Ambiente ha intensificado las acciones de Inspección, Vigilancia y Control para mitigar los impactos que afectan no solo el ambiente, sino la salud pública y la calidad de vida en Bogotá.

En el año se realizaron 662 visitas técnicas a las 19 localidades urbanas del Distrito y las de mayor índice de ruido fueron, en su orden, Antonio Nariño, Usme, Puente Aranda, Engativá y Kennedy.

“Controlar el ruido no es solo una cuestión de tranquilidad, es también un tema de salud pública. Exceder los niveles permitidos afecta la convivencia y puede generar impactos negativos”, añadió Soto.

Como parte de su estrategia integral de gestión en materia de ruido, la secretaría realiza operativos en conjunto con otras entidades distritales, orientados a comprobar si los establecimientos comerciales, industriales y de servicios cumplen con las normativas vigentes.

Además de aplicar sanciones, se promueve la sensibilización sobre la importancia de adoptar prácticas responsables que respeten los niveles sonoros permitidos.

Este enfoque busca no solo controlar las emisiones de ruido, sino también fomentar una cultura de corresponsabilidad entre empresarios y ciudadanos para avanzar hacia una ciudad más habitable y sostenible.

Controles de ruido ambiental en Bogotá
Controles de ruido ambiental en Bogotá | Foto: Secretaría de Ambiente

En ese sentido, la Secretaría de Ambiente de Bogotá hizo un llamado a los sectores económicos y a la ciudadanía a sumar esfuerzos para reducir la contaminación acústica en la capital. Las personas pueden reportar fuentes de ruido excesivo a través de la Línea 123, las alcaldías locales o en los canales oficiales de la entidad.

El control del ruido que afecta la convivencia de las comunidades es competencia de las alcaldías locales y las autoridades policivas (comandantes de Estaciones de Policía e Inspecciones), tal como lo establece la Ley 1801 de 2016 “por la cual se expide el Código Nacional de Seguridad y Convivencia Ciudadana”.

Cifras de 2024

  • Total de multas impuestas: $ 105.079.014.
  • Operativos realizados: 662 visitas técnicas a las 19 localidades urbanas del Distrito, de las cuales 20 incluyeron mediciones de presión sonora.
  • Localidades con mayor índice de ruido: Antonio Nariño, Usme, Puente Aranda, Engativá y Kennedy.
  • Áreas prioritarias: zonas comerciales y residenciales con mayor número de denuncias.

Factores que más contribuyen a la contaminación auditiva

  • El flujo vehicular y el estado de las vías.
  • El sobrevuelo de aviones.
  • La mixtura de suelo, que implica la cercanía de actividades residenciales con comerciales o industriales.
  • La baja calidad en las edificaciones en cuanto a aislamiento acústico.
  • La falta de responsabilidad de los propietarios de fuentes emisoras de ruido, especialmente aquellas actividades relacionadas con la venta y consumo de bebidas alcohólicas, quienes no cumplen con su obligación de controlar y mitigar la emisión de ruido.
  • El uso indebido del espacio público, que incluye actividades que generan niveles elevados de ruido en zonas urbanas.

En materia de control de ruido, los propietarios de los establecimientos son los encargados de controlar y mitigar acústicamente sus emisiones, con el fin de evitar perturbaciones a las comunidades aledañas.