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Mujer relata los momentos de terror que vivió durante violento robo en su casa en Bogotá: “Me golpearon, temo que me maten”

La víctima aseguró que tiene mucho miedo de que la maten por contar lo que pasó.

17 de febrero de 2025, 3:43 p. m.
Los ladrones cometieron el robo durante varias horas.
Los ladrones cometieron el robo durante varias horas. | Foto: Captura de video: @Marovaan

Momentos de terror y pánico vivieron unas familias después de que fueran víctimas de un violento robo al interior de un conjunto ubicado en la localidad de Suba, en el norte de Bogotá.

Una banda de delincuentes se hizo pasar por guardias de seguridad, ingresaron a los apartamentos, amenazaron a las personas y les robaron diferentes objetos y dinero en efectivo.

Una de las víctimas habló con la emisora Caracol Radio y relató los momentos de angustia que vivió junto a su hija. La mujer, que fue llamada Yolanda para ocultar su identidad, explicó cómo pasó todo en cuestión de horas.

“Como siempre nos acostamos muy temprano, pero timbraron en la puerta y yo me levanté. (...) Pensé que era mi hijo que había salido y me respondieron que era el guardia de seguridad”, comentó.

Así quedó la vivienda de una familia que denunció ser víctimas de una banda de atracados que se disfrazan de vigilantes.
Los ladrones también atacaron a los guardias de seguridad de la zona residencial. | Foto: Así quedó la vivienda de una familia que denunció ser víctimas de una banda de atracados que se disfrazan de vigilantes.

Ella se asomó y verificó que, en efecto, había una persona con un uniforme de vigilancia y esta le dijo que supuestamente se había reventado un tubo. “Yo tenía agua en el apartamento porque la echaron por debajo de la puerta”, contó.

De esta forma, la mujer fue engañada y terminó abriendo la puerta, ahí comenzó la verdadera pesadilla para ella y su hija. “Me empujaron muchos tipos, me tiraron al piso y ahí comenzaron a golpearme y jalarme del cabello”, señaló.

“Después cogieron a mi hija y la empezaron a golpear. Me sentaron a mí y me empezaron a gritar”, comentó. Los delincuentes, según dijo, la amenazaron con matarla si no hacía silencio.

Posteriormente, a ella la llevaron a la cocina mientras que a su hija la metieron a una habitación, lo que le generó mucho pánico. Segundos después las encerraron a las dos al interior de un cuarto de lavado, allí las amarraron.

“Estaban desesperados, esos desgraciados pensaron que yo tenía una caleta en la casa. Empezaron a pedirnos las claves y nosotras dimos todo. Nos seguían golpeando, se ensañaron fue conmigo”, relató.

Asaltantes irrumpen en conjunto residencial y despojan a residentes
Los delincuentes las amenazaron de muerte. | Foto: Montaje con capturas de videos tomadas de @Marovaan/ X

Mientras que los hombres buscaban, había una mujer que se comunicaba con ellos por medio de una radio y les indicaba todo como si se tratara de un operativo.

“Nos trajeron al cuarto, nos amordazaron, nos pusieron una cuerda en la boca y unas medidas veladas. A mi hija le pusieron cinta en la boca y le taparon con una cobija la cara, ella se estaba asfixiando”, explicó.

Sin importarles que Yolanda tuviera algunos problemas de salud, la pusieron en un rincón, lo que ocasionó que también se le fuera la respiración. “Esto fue un trauma psicológico terrible, es una tortura”, manifestó.

En ese momento, ella y su hija lo único que pensaron es que no saldrían vivas de allí, que los delincuentes estaban dispuestos a matarlas, por lo que simplemente comenzaron a orar.

Todo fue muy estudiado por parte de los ladrones, ya que comenzaron a preguntar en dónde estaba su hijo. “Se llevaron todo y se fueron para otro apartamento y nos dejaron con un tipo”, precisó la mujer.

Pasaron más de dos horas mientras que cometían otros robos en más viviendas, hasta que finalmente se fueron, pero antes hicieron algunos disparos.

Tras esto, lograron desamarrarse y salieron a la calle junto a otras víctimas para pedir ayuda, pues las dejaron totalmente incomunicadas. En medio del desespero, su hijo llegó en el carro, le contaron todo y finalmente se fueron hasta un CAI para dar aviso a las autoridades.

De acuerdo con el guardia de seguridad, fueron cerca de 40 hombres los que ingresaron al conjunto y cometieron varios robos. “Estamos atormentados y tenemos mucho miedo”, dijo la víctima.

“Temo que me maten por lo que yo estoy hablando, pero no me puedo quedar callada porque si no nos hacemos sentir entonces la delincuencia sigue haciendo de las suyas”, manifestó.