Bogotá

Nuevo rifirrafe entre el Distrito y la Nación por cuenta de la resolución para la reorganización de la Sabana de Bogotá: alcalde dice que tomará medidas

La resolución podría afectar a residentes de Bosa, Kennedy, Suba, Engativá y Fontibón y deja en “incertidumbre total” a porciones de la ciudad ya construidas.

4 de marzo de 2025, 10:24 p. m.
Alcalde de Bogotá, Carlos Fernando Galán, y la ministra de Ambiente, Susana Muhamad.
Alcalde de Bogotá, Carlos Fernando Galán, y la exministra de Ambiente, Susana Muhamad ante la nueva resolución para reorganizar la sabana de la ciudad. | Foto: Alcaldía de Bogotá - SEMANA

Se abre un nuevo capítulo en la tensa relación entre el Gobierno nacional y la Alcaldía de Bogotá por cuenta de los lineamientos para la reorganización de la Sabana de Bogotá, que el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible publicó en su página web desde el pasado viernes para que los diferentes sectores de la sociedad puedan hacer comentarios.

El tema de los humedales hacen parte de la reorganización de la sabana de Bogotá que el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible publicó en su página web. | Foto: Andrés Camilo Gómez

Luego de esto, la saliente ministra Susana Muhamad publicó un video en las redes oficiales de la entidad en el que recuerda que el plazo para dichos comentarios es hasta el 14 de marzo y que el propósito de los nuevos lineamientos es “conservar ecosistemas degradados, proteger los espacios del agua como límites ecológicos y asegurar la destinación agropecuaria y forestal del suelo rural”.

No obstante, el alcalde de Bogotá, Carlos Fernando Galán, no dudó en responder al video de la exministra diciendo que la publicación de la resolución para comentarios no era “ninguna consulta”, sino más bien “una publicación obligatoria disfrazada de consulta para sanear un proceso ilegal, inconstitucional y que puede generar un fraude a resolución judicial”.

Esto quiere decir que entre el Ministerio de Ambiente, la Alcaldía de Bogotá y las entidades territoriales “nunca hubo una concertación para expedir la resolución” y, en palabras del alcalde, la publicación de las normas tiene como requisito su publicación para comentarios, más no es un proceso de consulta.

En ese mismo trino, el alcalde señaló que desde su administración han solicitado numerosas reuniones con el Gobierno nacional y con la exministra Muhamad, quien “nunca quiso escuchar y, antes de irse, dejó sembrada una resolución que paralizaría a Bogotá y afectaría a millones de personas, pero hábilmente presenta la publicación obligatoria para comentarios, desconociendo la ley y el Acuerdo de Escazú”.

Pero la pelea entre el Distrito y la Nación por cuenta de decisiones ambientales que golpean el desarrollo de los proyectos de infraestructura en la ciudad no es nueva.

Altos funcionarios del Distrito aseguraron que el alcalde Galán tomará decisiones frente a las posturas del MinAmbiente y que la resolución, como está concebida, tiene el potencial de afectar a “una porción considerable de la ciudad ya construida, especialmente a las familias que viven en Bosa, Kennedy, Fontibón, Engativá y Suba”.

En ese sentido, dicen fuentes de la administración que el documento, como está, deja en “total incertidumbre” a las partes de la ciudad que ya están construidas y que, en virtud de ese texto, tendrían que modificarse. El alcalde Galán anunciará las acciones que tomará mañana miércoles.

Por otro lado, voces del Concejo de Bogotá, como Daniel Briceño, también advierten que la resolución expedida por el ministerio puede dejar a Bogotá y a Cundinamarca “sin nuevas vías, sin expansión del sistema eléctrico, elimina cualquier proyecto de expansión urbana, sin desarrollo, afecta la economía, la industria y el empleo”.

El cabildante señaló que los proyectos que esta resolución pondría en riesgo son: Vía Suba – Cota, ampliación autopista Norte, prolongación de la av. Boyacá, ampliación de la carrera 7.ª, Ferrocarril de la Sabana, avenida Longitudinal de Occidente (ALO), en todos sus tramos; también, el cable aéreo a La Calera, el Regiotram del Occidente, el Regiotram del Norte, Lagos de Torca, el Aeropuerto Guaymaral y Chingaza II.

¿Qué dice el texto del MinAmbiente?

La exministra Muhamad resaltó en el video publicado en las redes sociales la importancia de este proyecto que “permite armonizar el desarrollo con la conservación de la biodiversidad de la región, ordenar el territorio alrededor del agua y guiar su transición y adaptación climática”.

El objetivo de realizar los estudios es poder garantizar la seguridad hídrica de los municipios de la Sabana de Bogotá
El objetivo de realizar los estudios es poder garantizar la seguridad hídrica de los municipios de la Sabana de Bogotá. | Foto: Gobernación de Cundinamarca

“La Sabana de Bogotá es una región de importancia ecológica para el país, por eso con estos lineamientos de ordenamiento ambiental buscamos conservar ecosistemas que están degradados, proteger los espacios del agua como límites ecológicos para un buen ordenamiento territorial y asegurar la destinación agropecuaria y forestal del suelo rural de la Sabana”, afirmó la ministra Muhamad.

Este proyecto, según quedó establecido en el documento, destaca la urgencia de proteger cinco áreas de especial importancia ambiental en la Sabana de Bogotá: zonas de recarga de acuíferos, bosques naturales andinos, bosques secos subxerofíticos, humedales y áreas de amenazas naturales. Las medidas de ordenamiento aplicarían para Bogotá, 35 municipios de Cundinamarca y 4 del Meta, beneficiando a más de 10 millones de habitantes.

Entre las principales medidas que adopta la resolución está que el suelo rural debe mantener su vocación agropecuaria y forestal y, por lo tanto, no podrá haber urbanización y sellamiento fuera de los polígonos de expansión que ya están incluidos en los planes de ordenamiento territorial.

También establece que se busca proteger los humedales y que por esa razón se deben incluir de forma obligatoria dentro de los planes de ordenamiento territorial todos los humedales que están en el Sistema de Información Ambiental de Colombia al año 2023. Además de su restauración y conservación, y que esa inclusión no dependerá de si el POT está o no declarado.

Por el lado del agua, la resolución también impone límites al uso del recurso hídrico y le solicita a la CAR que realice un estudio de agotamiento de agua en la Sabana de Bogotá; también se establecen lineamientos para la autorización de los trasvases de cuenca, teniendo en cuenta las condiciones y el potencial que debería tenerse en materia de ahorro y reúso de agua, y la utilización de aguas lluvias y la disminución de pérdidas técnicas.