Estudiantes hacen campamento en Piedecuesta, Santander, para evitar tala de árboles

Más de tres meses cumple un grupo de jóvenes ambientalistas protestando para evitar que continúe el presunto arboricidio en el sector del Paseo del Puente 2, en el municipio de Piedecuesta (Santander); donde se adelantan los trabajos de construcción de un conjunto residencial por parte de una reconocida empresa.

De acuerdo con el Comité Guardianes Eco Agua Piedecuesta Viva, en el sector hay cerca de 90 árboles nativos, en su mayoría Caracolí, de estos la empresa al parecer ya taló más de 19 especies. Situación por la cual, el grupo de defensores optó por armar un campamento permanente en el lugar para evitar que continúe la tala de árboles.

“En el lugar se encuentra un grupo de jóvenes estudiantes, allá duermen en cambuches y han sido hostigados, han pasado a darles plomo y realmente está en riesgo la vida de esos muchachos”, dijo un veedor del municipio.

Son cuatro hectáreas las que conforman el lote destinado la construcción de viviendas de interés social; sin embargo, la comunidad asegura que esta es una zona de reserva y, además, el hábitat de muchas especies que, ahora, estarían en peligro.

En vista de esta situación, los jóvenes ambientalistas continuarán viviendo en los cambuches que instalaron para proteger la flora y fauna del sector. Además, buscan que este proyecto no continúe debido a los impactos ambientales que genera.

La constructora responde

Ante las denuncias hechas por la comunidad del barrio Paseo del Puente, sobre la tala de árboles que se adelanta en el sector para la construcción de un proyecto de vivienda a cargo de la constructora Marval, la empresa respondió a las acusaciones.

La obra, denominada Álamos del Puente, se está realizando en el distrito sur del municipio Garrotero y, de acuerdo con la constructora, “se trata de un conjunto de vivienda multifamiliar que cuenta con 8 torres de viviendas. El proyecto, además, entregará nuevas vías y espacios públicos a los habitantes del sector”, indicó Marval.

Con respecto a la no socialización del proyecto y que presuntamente se habría iniciado sin tener los respectivos permisos tanto para la construcción como para la tala de especies nativas, la constructora señaló que cuenta con todas las licencias urbanísticas vigentes.

Y, además, obtuvo el permiso de la Corporación Autónoma Regional (CDMB) para “la tala de 42 árboles, con una compensación forestal de 1.040 árboles por aprovechamiento y levantamiento de veda. El proceso de contratación para la siembra se realizará de la mano de la CDMB en las áreas concertadas con ellos”, sostuvo la empresa

Adicional a esto, Marval aseguró que los árboles que se plantarán en compensación serán mantenidos durante tres años por la empresa para garantizar su crecimiento y conservación. “Hemos acreditado ante la autoridad competente los permisos que nos otorgan el aprovechamiento forestal que se ejecutó”, aseveró.

En ese sentido, la constructora explicó que Álamos del Puente hace parte del sector Paseo del Puente, cuyo proceso de urbanización, en sus diferentes proyectos, generará más de 3.2 hectáreas de cesiones para parques y equipamientos comunales públicos, alrededor de 1.5 hectáreas de rondas hídricas de protección del Rio de Oro que se integran con el complejo de parques, 3 kilómetros aproximadamente de vías peatonales y una extensión equivalente en vías vehiculares de los cuales 700 metros son contribución del proyecto, todo lo cual hace parte de la malla vial pública del sector con lo cual se garantiza la conectividad entre la carrera 2 y la carrera 6, así como con la calle 25 de esta zona sur del municipio de Piedecuesta.