Detonan carga explosiva contra tanqueta en operativo policial en El Tambo, Cauca

Un uniformado herido es el saldo parcial de un atentado con explosivos contra una tanqueta en inmediaciones de El Zarzal, en el municipio de El Tambo, Cauca.

El hecho ocurrió a las 8:50 a. m. de este martes, 22 de abril. Es importante recordar que disidentes de las Farc regaron en la zona, el 17 de abril, un panfleto amenazante en el que pedían a la comunidad alejarse de estaciones de Policía.

Según un reporte inicial conocido por SEMANA, la detonación sucedió cuando una tanqueta del Grupo de Operaciones Especiales (Goes) transitaba por la vía que comunica a Popayán con El Tambo, Cauca.

Luego, los ilegales, presuntamente de la estructura Carlos Patiño - Compañía Samantha Gómez, de las disidencias, dispararon en repetidas ocasiones contra el automotor.

El atentado deja un policía herido y se suma a otras acciones violentas ocurridas durante las últimas horas contra las autoridades.

De hecho, SEMANA reportó que hacia las 9:30 de la mañana de este martes, mientras un convoy militar realizaba un desplazamiento estratégico entre El Peñón y Los Andes Sotomayor, a la altura del corregimiento de Las Cochas, fueron emboscados.

El saldo preliminar de este ataque es de un civil muerto y cinco soldados heridos.

“Unidades de ingenieros militares de la Brigada 23 fueron blanco de un ataque con artefactos explosivos improvisados, mientras se desplazaban en un vehículo institucional en cumplimiento de labores de mantenimiento vial, orientadas a mejorar las condiciones de movilidad para las comunidades de la región”, señaló el Ejército a través de un comunicado.

En la zona donde ocurrió este ataque, actúan las disidencias Franco Benavides, al servicio de alias Iván Mordisco.

A comienzos de marzo, SEMANA reveló los rostros de presuntos integrantes de las disidencias de las Farc en el Cauca.

Entre ellos está alias Kevin, señalado como uno de los principales cabecillas de la estructura Carlos Patiño, quien habría desplegado una campaña de amenazas y desplazamiento forzado contra la comunidad.

“Amenaza de muerte a la población civil, de destierro de sus fincas, donde tienen que abandonar sus tierras, donde deben cerrar todo el comercio de la región”, denunció entonces el general Federico Mejía, comandante de la Tercera División del Ejército.

También estaba bajo la mira de las autoridades alias Eduard Ramírez, supuesto cabecilla de la compañía Samantha Gómez, a quien se le había delegado la tarea de movilizar a la población civil para generar bloqueos y presionar a las autoridades.