Donde había un cañaduzal, ahora hay un colegio para más de mil estudiantes en el norte del Cauca: esta es la historia

Los estudiantes de la zona rural del municipio de Villa Rica, Cauca, carecían de instalaciones apropiadas para asistir a sus clases. A falta de un colegio, por mucho tiempo los alumnos y docentes tuvieron que atender las jornadas escolares en una caseta comunal y en casas puestas a disposición por los habitantes del corregimiento Juan Ignacio.

Estas difíciles condiciones hicieron que el clamor de la comunidad educativa por contar con un colegio aumentara con el paso de los años hasta hacerse realidad.

El pedido de un colegio nuevo para asistir a clases en condiciones dignas terminó con la entrega de la sede de la Institución educativa Juan Ignacio, luego de catorce meses de construcción y una millonaria inversión.

Tras una inyección de 6.000 millones de pesos, más de 1.200 estudiantes cumplirán el anhelo de asistir a un colegio digno. Las nuevas instalaciones cuentan con más de 21.000 metros cuadrados en los que se pueden encontrar seis salones, un aula múltiple y de alimentos, un salón de artística y danzas, y cinco aulas polivalentes compuestas por un taller de electrónica, un área administrativa, un laboratorio, una biblioteca y una sala de informativa.

De acuerdo con Roller Escobar Gómez, alcalde de Villa Rica, los recursos para construir el colegio salieron de las arcas del municipio y fueron obtenidos a través de los pagos de impuestos de las empresas radicadas en dicha localidad.

“La comunidad educativa llevaba más de trece años esperando esta obra. En el lote donde se construyó el colegio había un cañal por donde la gente pasaba y no veía la posibilidad de que hubiera algo diferente a un cultivo, pero gracias a la gestión hecha por varios gobiernos y la lucha de la comunidad, logramos esta construcción”, aseguró Escobar, quien espera que los estudiantes se sientan inspirados por este impulso en el desarrollo de la zona rural de Villa Rica.

El colegio fue entregado a la comunidad del corregimiento San Ignacio en un acto que contó con la participación de una banda marcial, estudiantes, docentes y la Alcaldía. Desfilaron desde la caseta comunal donde antes se desarrollaban las jornadas escolares hasta la nueva sede de la institución Juan Ignacio. Al llegar, un padre bendijo la infraestructura y fue cortada una cinta para después realizar un recorrido por las instalaciones.

Estudiantes y docentes se mostraron satisfechos con la obra y aseguraron tener muchas expectativas por el inicio de las actividades escolares en las instalaciones. “Siento mucha satisfacción porque es un sueño hecho realidad. Recuerdo cuando, con padres de familia, veníamos a ver el terreno, por eso es maravilloso poder ver ahora esta construcción para la comunidad”, reflexionó la docente Carmen Carabalí.